Jérémy Blasco se ha despedido este jueves de la afición de la SD Huesca. Después de tres años, se marcha del club azulgrana en busca de nuevos retos. Ahora, su futuro está en Polonia.
"Ha llegado el momento de cerrar una etapa muy especial en mi vida y dar paso a un nuevo reto profesional. No es fácil poner en palabras todo lo que he vivido en este tiempo".
Blasco continúa recordando que Huesca "no ha sido sólo el club donde he crecido como futbolista, sino también un hogar donde me he sentido querido y respetado desde el primer día. He compartido vestuario con grandes com,pañeros, he trabajado codo con codo con un cuerpo técnico y un staff de primer nivel, y sobre todo, he sentido el aliento incondicional de una afición que nunca deja de creer".
Ha agradecido a la afición "por estar en cada partido, en cada momento bueno y también en los más difíciles. Gracias por el cariño, por la confianza y por hacerme sentir uno más de esta gran familia. Llevar este escudo ha sido un honor que nunca olvidaré".
Ahora le toca "seguir otro camino, me voy con el corazón lleno de gratitud y con la certeza de que este club y su gente siempre ocuparán un lugar especial en mi vida. Seguiré apoyando desde la distancia, y quién sabe... el fútbol siempre da vueltas. Hasta pronto, con todo mi cariño. ¡Vamos Huesca, Fieles Siempre Sin Reblar!".