Joaquín Muñoz, la avispa, se despide de la Sociedad Deportiva Huesca y en el espejo retrovisor deja una frase: "Nunca dejé de darlo todo en el campo, luchando por esta institución". Y una conclusión: "Me habéis hecho crecer como futbolista, pero, sobre todo, como persona".
El extremo del Huesca comienza su despedida: "Parece que fue ayer cuando comenzó esta aventura... y qué aventura". Recuerda cuando llegó a la ciudad "siendo un chico de 19 años, con el sueño de jugar al fútbol profesional. Y creo que lo conseguimos con creces. Estos seis años han sido una etapa muy importante de mi vida. He sido muy feliz en muchos momentos; en otros no tanto, pero no quiero que esos momentos empañen los buenos recuerdos".
Ha llegado el momento, agrega, "de tomar caminos distintos". Nuevo rumbo pero, antes de partir, quiere "dar las gracias a todos: desde el primero hasta el último. A los distintos responsables del club, a los cuerpos técnicos con los que trabajé, al personal de utillería y lavandería, a nuestros fisios, a mi gente del gimnasio, a los trabajadores de oficinas y tiendas del club, y por supuesto, a todos los compañeros con los que compartí vestuario y que fueron un apoyo constante en mi vida".
Encauza una parte fundamental a la afición: "Gracias por enseñarme el verdadero significado de este club, "Fieles Siempre sin Reblar" y ser capaces de darle la vuelta a las situaciones más adversas". En ese momento, reconoce: "Escribo estas palabras con un nudo en el corazón. No nací en Huesca, pero vosotros me disteis la oportunidad de comenzar mi carrera deportiva. Y como dice mi madre: "Es de bien nacido ser agradecido". Por eso, una vez más, gracias por cada momento compartido, por cada lucha en busca de lo mejor para este club".
Con 26 años, marcha "con la conciencia tranquila de haber dado siempre lo mejor de mí cuando me tocó defender esta camiseta. Estuve más o menos acertado, pero nunca dejé de darlo todo en el campo, luchando siempre por esta institución".
Concluye con los deseos al Huesca del "mayor de los éxitos, tanto deportivos como personales. Una pequeña parte de mi corazón siempre se quedará en esta ciudad".