Jorge Pulido ha sido la voz más que autorizada para valorar la nueva etapa tras la primera sesión de entrenamiento del equipo en esta temporada. “Es la primera toma de contacto después de un mes y poco de vacaciones, y hemos vuelto con ganas e ilusión”. Con los galones que le concede, valoraba las nuevas incorporaciones y su papel con ellos. “Los que llevamos más tiempo aquí, los más veteranos, esperamos transmitirles qué es la SD Huesca. Sus valores, qué es la ciudad, la provincia… e intentar integrarlos lo máximo posible para intentar que den el máximo rendimiento posible dentro del campo”.
El capitán ha extraído las primeras conclusiones sobre el nuevo entrenador, Sergi Guilló. “Me transmite cosas muy buenas. Es un tipo joven, actualizado, con ganas de crecer, y esperamos que esa ilusión y esas ganas, esa convicción que tiene, nos la pueda transmitir”.
Ocho incorporaciones marcarán el trabajo de la pretemporada del equipo. “Tener tantos jugadores a día de hoy es algo increíble. Poder trabajar desde el día uno juntos, tanto en la preparación física como en la táctica. Y en ese aspecto, ojalá pueda darnos eso un plus”.
Jorge Pulido se ha acostumbrado al no reblar. “Esperamos poder seguir transmitiendo esa ilusión del año pasado”, consideró. “No es fácil, porque la Segunda División no lo es. Pero hay que tener tranquilidad, estar unidos y tener ilusión, yo creo que es la clave para hacer una buena temporada”.
Tira de memoria el gran capitán para una lectura serena y esperanzadora. “Desde que estoy en Huesca, siempre he dicho lo mismo. Ojalá podamos dejar al equipo en el fútbol profesional. Es el mayor de los retos posibles. Una vez lo consigamos, veremos si podemos soñar o no”.
Ahora, el gran reto es conformar piña, hacer equipo. “Hay que tener ilusión y formar una familia. Creo que es la clave de esto. En los últimos tiempos, al margen de que algunos jugadores hayan estado muy bien, ha sido el equipo el que nos ha sacado adelante. Y es lo que hay que intentar, continuar con ese trabajo, y mantener esa gran comunión con el aficionado. Ese Alcoraz que vivimos el año pasado. Había un aura muy especial, algo que vamos a intentar seguir transmitiendo”.
A sus 34 años, el capitán de la SD Huesca aseguró tener la ilusión intacta ante su novena temporada como azulgrana. “A todos los deportistas nos gustan los retos. Soy consciente de que tengo 34 años, pero los días como hoy, de volver al trabajo, los disfruto como un niño pequeño. Vuelves a hacer lo que te gusta, lo que te hace feliz”.