Iker Kortajarena está viviendo su primer año defendiendo la camiseta de la SD Huesca. Tras su llegada el pasado verano, fue un hombre importante en la pretemporada ante la ausencia de centrocampistas y fue indiscutible en las primeras jornadas de liga a las órdenes de Cuco Ziganda. Poco a poco fue perdiendo protagonismo, pero desde hace unas semanas va entrando con asiduidad en las segundas partes.
Este jueves ha sido el protagonista en la sala de prensa de la BAF, donde ha repasado la actualidad del equipo. Ha recordado que el año "acabó muy bien" con ese triunfo vital y contundente ante el Cartagena. De cara al nuevo 2024, pide "mejorar y aportar en todo lo que pueda al equipo, ya sea desde el banquillo o desde el campo. Voy a estar disponible para lo que me pida el míster".
El domingo, el equipo viaja hasta Gijón (16:15h) con la intención de conseguir tres puntos y "hacer un buen partido". Ha analizado diciendo que "será un partido muy difícil porque ellos están arriba. Será muy disputado y muy complicado. Está claro que van a apretar".
El centrocampista vasco ha disputado 11 partidos en los cuales ha sido titular en seis ocasiones. En su cuenta particular lleva un gol; el que le metió al Cartagena en la última fecha liguera y que le permitió quitarse la espinita que tenía clavada de la jornada anterior, cuando erró una clara ocasión ante el Levante en el Ciutat de València. En total ha disputado 558 minutos.
No ve más allá del "partido a partido", en ese mantra ya instalado en el mundo del fútbol. En caso de salir de los puestos de descenso, lugar donde el Huesca está desde hace muchas semanas, "creo que habrá más tranquilidad porque estar ahí abajo es duro, siempre hay nerviosismo".
Para cambiar esa situación aboga por el "ir al límite", algo que les inculca Antonio Hidalgo. Pide a la afición que arrope al Huesca, porque "cuantos más seamos, mejor para todos".