FICHA TÉCNICA
Zamora Enamora: Powell (15), Round (16), Peris (13), Buckingham (17), Pauksté (11) -cinco inicial-, Shelist (3), Naspler (12), Sáenz-Díaz (), Ukawuba, Larrea, Tejedor (2).
Lobe Huesca La Magia: Scariolo (7), Stumer (4), Iglesias (4), Nogués (4), Kumpys (22) -cinco inicial-, Rubin de Celis (2), Malo (10), Solá (5), Terreros.
ÁRBITROS: Francisco Javier Rodríguez y Cristian Ruiz.
Parciales: 22-11; 21-17; 26-19 y 20-11.
Zamora Enamora ha aprovechado la limitación de recursos de Lobe Huesca La Magia para exhibir una puntería portentosa y destrozar a triples a los de Rafa Sanz, que han hecho la goma en tres ocasiones pero al final se han rendido a la calidad de los zamoranos, que cuentan las jornadas por victorias.
Los castellanos han salido en modo tromba y rápidamente han hecho un parcial terrorífico (17-2) con jugadores con una excelente mano como Round y Buckinham, pero Kumpys ha decidido que era tiempo de un solista para ser, de hecho, el que tomara las mejores decisiones en ataque hasta acortar a un 22-11 al final del primer cuarto que, visto lo visto, parecía un atisbo de esperanza.
La dirección no iba fina y los jóvenes Scariolo, Nogués y Rubin de Celis no podían con la enorme potencia de la línea exterior local. Los 2,24 de Pauksté se antojaban una enormidad y, sin embargo, los primeros minutos del segundo cuarto han sido esperanzadores. Kumpys machacaba una y otra vez el aro zamorano y se han acercado los de Sanz al 26-24. Ahí se ha producido el segundo parón, un nuevo parcial de 17-2 con un Powell demoledor desde la línea de tres, para acabar con 43-28 por la primera canasta de Alessandro Scariolo.
La segunda mitad ha registrado el último arreón del Lobe Huesca La Magia, que con un triple de Kumpys y el acierto de Malo alcanzaba el 49-39. Ahí ha llegado el volcán en erupción de Round, Buckingham y Naspler. Cinco tiros en un abrir y cerrar de ojos para ponerse ya 69-45 al concluir el tercer cuarto con un parcial de 18-4.
El acto final ha sido un correcalles en el que los jugadores del Peñas han admitido su inferioridad. Ni una sola falta en diez minutos, resignación absoluta, intentos triples sin ton ni son y muchos pecados de juventud, con lo que la brecha se hacía más y más grande. Al final, 89-58. Las estadísticas son contundentes: 42 rebotes por 26 del Lobe Huesca La Magia. 13 de 29 en triples zamoranos por 5 de 31 visitantes. Y un dato demoledor: sólo Kumpys en dos dígitos realizadores.
Lo explicaba Rafa Sanz. Zamora Enamora es en estas condiciones inaccesible a su equipo. No es partido para análisis críticos, sino para la transición hacia una normalidad en una plantilla corta.