El presidente de la Fundación Alcoraz, Manuel Ollé, se ha llevado "un alegrón por todos. Por la Sociedad Deportiva Huesca en primer lugar, pero también por mi buen amigo Agustín Lasaosa, por Carlos Laguna y, aunque ya fue sobreseído, por Juan Carlos Galindo".
Sostiene el máximo dirigente de la fundación propietaria del 66 % de las acciones que "es un paso muy importante para todos. Para ellos personalmente, para la institución y también porque se ha hecho justicia. Se ha demostrado que el club, el presidente y los otros dos afectados habían sido investigados sin que hubiera jurídicamente actuaciones constitutivas de delito".
¿Y ahora qué tras el archivo y ante la promesa que el presidente anterior de la Fundación hizo a Lasaosa en el momento de su salida? "Pues ahora lo que toca es reunir la Fundación, analizar la situación, conocer aquel compromiso y tomar las decisiones que estimemos oportunos los patronos". Dentro de la alegría, prudencia.