La atleta de Intec-Zoiti Belén Villarroya no ha tenido su mejor día en su puesta de largo como internacional en el concurso de disco del FOJE que se celebra en Skopje (Macedonia). Los nervios del debut han pasado factura a la campeona de España Sub-18, título que consiguió hace apenas dos semanas.
La joven turolense acudía a la cita con la séptima marca del ranking de la competición, con 46,13 metros de registro, y el objetivo era poder meterse en la mejora. Pedían 43 metros, al alcance de sus posibilidades. Pero no ha entrado bien en el concurso, con dos lanzamientos nulos y otro que apenas ha llegado a los 40 metros (39,37) para ser finalmente duodécima.. Hubiera pasado la criba en cuarta posición con su marca (46,13 ha lanzado la turca Sirin, que ha sido cuarta en la primera tanda) e incluso séptima de haber llevado el artefacto hasta los 43. Incluso en la clasificación final habría mantenido el séptimo puesto con su marca y habría rozado el podio de haber mejorado un metro. Lo cual quiere decir, en una visión optimista y positiva, que es lo que merece una deportista joven y currante como Belén, que lo que hoy ha sido lejos, su verdadero potencial le deja más cerca a poco que las cosas salgan bien.

Los nervios y el agobio le han superado. Pero se queda con la experiencia que supone haber podido batirse con las mejores discóbolas europeas de su categoría, que no es poco y que no todos lo pueden contar. Así que ahora, a disfrutar de las vacaciones y a pensar en la temporada que viene, donde ambicionará seguir mejorando, progresando y buscando los resultados que le lleven de nuevo a vivir otra internacionalidad.
El oro ha sido para Mirabella Keseru (Hungría) con 50,77, la plata para Theodora Kirmanidi (Grecia) con 47,63 y el bronce para la chipriota Marina Hadjicosta con 47,34. Y todas con marca personal.