La IV Marcha de Nocito Sierras y Barrancos, Valles y Pueblos ha transcurrido con todo lo que apetece de la montaña, de la naturaleza que no entiende de comodidades sino de exigencia y de diversidad. Todo arrancaba satisfactoriamente por los preparativos del día anterior en el Refugio de Nocito, Casa Lardiés, para dejar todo dispuesto para el día siguiente y solventar la incertidumbre por la fuerte tormenta caía entre las 2 y 3 de la madrugada. No había camino para la duda. A las 8,15 horas, después de la entrega de las credenciales, se daba la salida, no sin antes unas breves palabras de bienvenida y la entrega de los premios de Podoactiva a los dos participantes agraciados.
Casi despejado ya el cielo, todo hacía presumir que habría un buen día el resto de la jornada. Cien participantes, bien pertrechados, pasaban debajo del arco de la Comarca de la Hoya, para comenzar la caminata atravesando Nocito. Vistazo a la derecha para, desde el puente romano, tener las primeras vistas impresionantes del Tozal de Guara, semi cubierto por las nubes que están abrigándolo a media altura.
La senda lleva a todos, casi en fila india, hasta el semi despoblado de Bentué de Nocito, donde se realiza la primera parada para recoger el bocadillo de jamón, fruta y bebida que ha preparado la organización. Unos dan cuenta de él ahí mismo y otros se lo reservan para la parada en Abellada, a donde se llega después de disfrutar del espectáculo que nos brinda la naturaleza, con el verdor intenso de la vegetación y las hermosas y placenteras badinas que se encuentran en el recorrido por la barranquera.
Después de retomar fuerzas y transitar por las ruinas del despoblado, se abandonaba para incorporarse al GR-234 que discurre por encima del valle de Nocito. En todo este recorrido, sin duda, las mejores vistas de la Sierra de Guara y del Valle, especialmente hasta la Pardina Latorre, donde escasamente resisten en pie dos paredes de la ermita de San Antonio.
La avanzadilla del grupo sigue el recorrido principal, el inicialmente marcado por la organización, descendiendo hasta Bentué, donde espera el equipo de logística para avituallar de nuevo y desplazarse después hasta el Santuario de San Úrbez, donde el amigo Tirso espera para abrir las puertas y mostrar a los participantes el templo con las ultimas reformas realizadas.
Las nubes seguían avanzando por la Sierra de Aineto, en algún momento amenazantes, pero en cambio Guara ya lucía totalmente despejado. El marco que ofrece la ubicación de San Úrbez es un excelente pórtico para fotografiar el valle.
El descenso hasta Nocito se realizaba junto al crucero, siguiendo el GR, que con continuos zigzag por terreno de cárcavas, sin apenas dificultad, y buscando, al revés que esta mañana, las zonas de sombra que proporcionan carrascas y quejigos centenarios.
A las 14 horas, sin haber generado trabajo para la ambulancia, todo el mundo ha llegado al Refugio de Peña Guara "Casa Lardiés", sano y salvo, y con la satisfacción de haber disfrutado de una muy buena jornada, que rematar con una doble paellera de marisco.
Desde el club nuestro agradecimiento al Refugio "Casa Lardiés", y a sus guardianes, Almudena y Sara, por su disposición con la Organización, al Ayuntamiento de Nueno, por estar ahí con su colaboración y por supuesto a los voluntarios del Club, especialmente a Manolo, Nino y Tony, por su tiempo y hacer posible ese granito de arena para poner en valor este único Valle de Nocito.