La Federación Aragonesa de Montañismo recogerá el próximo día 15 el premio Calibo por la gestión de los refugios de montaña en la comarca y la labor de promoción turística. Así lo ha decidido el jurado del Ayuntamiento de Graus, quien concede estos premios, que se entregan cada 15 de septiembre, en los últimos coletazos de las fiestas patronales de Graus en honor al Santo Cristo y San Vicente Ferrer, para reconocer las "iniciativas que se hayan destacado por el desarrollo y promoción de Ribagorza, independientemente de la faceta en que se hayan realizado".
Javier Franco, presidente de la FAM, señalaba que es un "orgullo" este premio porque, además, "es un año tan simbólico como los 25 años del premio". Significa un reconocimiento a "los guardas y a todas las personas que trabajan para que los refugios ayuden a conocer, disfrutar y conservar la riqueza del medio natural de la Ribagorza". Los refugios, resaltaba Franco, son instalaciones abiertas a todos y todas "para facilitar la práctica del montañismo". También tienen un "papel en la seguridad y el cuidado medioambiental".
El acta de concesión del premio destaca que la FAM realiza “una importante labor de dinamización del turismo atrayendo a visitantes a lo largo de todo el año” y que la Federación “con la finalidad de conservar el medio ambiente y el paisaje, apuesta por prácticas sostenibles en los refugios, con iniciativas que reducen el impacto ambiental en entornos frágiles y de gran riqueza natural”.
En la Ribagorza, la FAM recuerda que gestiona los refugios de alta montaña Angel Orús, Estós, La Renclusa y Cap de Llauset, a lo largo del GR11 Pirenaica. En la sierra de Montsec se ubica el albergue de Montfalcó y la lista se completa con la Escuela de Montaña de Benasque. Así, la comarca suma hasta cinco refugios de la FAM, más que ninguna comarca de Aragón.
El presidente de la FAM ha señalado también el trabajo realizado, en colaboración con las instituciones públicas aragonesas, para modernizar los refugios, mejorando las habitaciones y los baños, y que así sigan siendo un instrumento “para el desarrollo sostenible de La Ribagorza”.