El entrenador de Lobe Huesca la Magia, Rafa Sanz, ha comparecido por vez primera en la temporada 2025 y ha prometido humildad, trabajo y pies en el suelo, eso sí, con la ambición del playoff de ascenso y con la certeza de que el equipo va a conectar con el público porque va a ser atrevido.
El andaluz ha enfatizado en la complejidad de la confección de la plantilla, "ha sido una labor ardua" y ha valorado la renovación de tres jugadores (Rubin de Celis, Figueroa y Vázquez). "Nos hubiera gustado renovar a más jugadores, pero no se puede luchar contra los que han ido a Primera FEB y algunos que van a jugar en Segunda FEB en equipos que les han ofrecido mejores condiciones y ellos han entendido que allí tenían mejores condiciones económicas y deportivas, por lo que marcharon".
El técnico cordobés ha apreciado lo positivo de "tener cada año jugadores que se revalorizan y que crecen, pero evidentemente para el proyecto deportivo es un hándicap tener que empezar casi de cero. Hemos ido a buscar jugadores que, como es costumbre nuestra, estén en cuarto creciente, que tienen todavía margen de mejora y crecimiento, y hemos hecho un equipo joven, ambicioso y que entienden que tienen en Huesca una oportunidad de crecimiento, pero sin olvidar que el club está por encima de eso, que es un club profesional y no una academia. Que la academias ya hay muchas por allí haciendo businness, esto es un equipo profesional que tenemos que competir e intentar volver a estar en el playoff y que el Peñas esté entre los mejores".
Rafa Sanz ha recordado que van llegando poco a poco y hay que tener paciencia para ir incorporando a los jugadores que faltan aún por llegar y, además, "tenemos que intentar construir un equipo. Ahora mismo estamos todavía en una fase muy inicial y tenemos que ver si en tres o cuatro semanas podemos ir dando una idea de lo que queremos ser colectivamente".
Ha recordado el nivel del año pasado que ha dificultado la conformación del equipo, que "acarició el ascenso, pero ahora hay que reconstruirlo. Ha sido un verano muy difícil, con mucho trabajo, muchas horas, mucha dedicación, mucho sacrificio personal y familiar, pero el éxito de los equipos se suele construir ahora".
Ha estimado que los tres jugadores que siguen ayudarán y, de "los que hemos fichado, muchos de ellos tienen la capacidad de adaptarse rápido a hacer un juego rápido, dinámico y valiente. La mayoría de los jugadores encontrarán pronto su punto. Nos quedan jugadores por incorporar, por llegar, pero creo en líneas generales los que hemos fichado están en esa línea de ser un equipo proactivo y que conecte con la grada pronto".
Rafa Sanz ha tirado de su habitual filosofía para señalar: "Jugamos para la gente, la gente viene a divertirse, bastantes problemas tiene cada uno en su vida como para venir aquí a pasarlo mal o a sufrir, la gente conecta con el equipo porque no especula, es un equipo valiente, la gente joven tiene eso de serie la mayoría. La gente va a conectar con el equipo porque va a ser un equipo atrevido".
Desde su experiencia deportiva de jugador limitado y posteriormente de entrenador, no quiere establecer comparaciones porque es lo que más odian los deportistas. "Mal haríamos aquí si estuviésemos comparando al que llega con el que se fue. Eso molesta a cualquiera en cualquier puesto de trabajo. Que te comparen con el anterior para dejarte mal... Yo creo que lo del año pasado, cerrado está, tenemos que construir un nuevo capítulo con los ingredientes que tenemos. Son jugadores nuevos y tenemos que darles mucha confianza, mucho cariño, mucha exigencia e intentar que cada uno sea cada uno".
Ha apreciado importante tener a todos los jugadores pronto y "vamos a conseguir ser sólidos desde el principio", no como el año pasado en que costó más en defensa con el agravante de no disponer del palacio. Eso sí, no ha querido "vender humo, que tiene un recorrido corto. Yo le diría a la gente que nosotros ambicionamos el playoff. Eso lo verbalizo y lo digo públicamente. Más allá de eso hay que demostrarlo, ir con una frase grandilocuente tiene las patas muy cortas", por lo que hay que ser "humilde, trabajador y poner los pies en el suelo".