Rafa Sanz ha reconocido que el equipo ha comenzado "muy nervioso, hemos tenido muchas imprecisiones. El partido ha tenido un ritmo muy alto, con muy poco cierto en el inicio y ha habido un desgaste físico muy grande. Con muy poco acierto y clarividencia delante. La primera parte ha sido dura para un ojo de exquisitez, de muchas imprecisiones y en el que no hemos encontrado la mejor solución en ataque".
En la reanudación, sin embargo, ha aparecido "más dinamismo y capacidad de ejecución, no hemos retenido el balón. En la segunda parte nos hemos superado a nosotros mismos y creo que hemos sido acreedores a este triunfo que nos mete en el playoff y nos da una gran alegría a nosotros".
Ha admitido que el playoff de ascenso llegará con "dificultad, con una plantilla cortita que nota a veces la ausencia de un jugador incluso en el trabajo diario, pero en líneas generales yo creo que el Peñas se hace acreedor de estar en el playoff. El esfuerzo del club por mejorar este año respecto al pasado, el cariño que nos da la gente de Huesca y ese sentimiento que hay de que el Huesca perviva y se codee con los mejores nos hace acreedores. Vamos con ilusión y a ver si somos competitivos y de dar la cara y defender el escudo con dignidad".
El entrenador afirma que el objetivo es "ser competitivo. Siempre lo somos, con victorias o con derrotas. Para nosotros, acabar la temporada con 14 victorias es un buen registro a pesar de llevar casi tres meses con poquitos jugadores. Damos la cara siempre".