Rafa Sanz, entrenador del Lobe Huesca La Magia, ha comparecido con la satisfacción de contar con todos los jugadores ante un equipo que todavía conoce la victoria y una prevención: "Hay que afrontarlo con la mentalidad de encontrarnos las mayores dificultades posibles, porque en estos partidos pasas de la relajación a la ansiedad en muy poco tiempo". Miras la clasificación de Algeciras, parece que va a resultar fácil "y te vuelves más vago y egoista, y la realidad te sobrepasa y te pones nerviosos. Y te enfrentas a un equipo que a priori iba a estar entre los dos o tres mejores del grupo, desconocemos las circunstancias por las cuales no están ahí, porque por inversión, calidad de plantilla, capacidad física, número de jugadores pintaba que era uno de los favoritos. Tenemos que afrontar el partido con absoluto rigor ni cargarnos de presión. Tenemos que jugar con determinación, confianza y humildad".
"Igualado, reñido, duro y difícil". Así hay que concebir el encuentro, "hacerlo con mucho rigor, intentar no perder muchos balones porque ellos contraatacan muy bien y a campo abierto son muy peligrosos".
Está satisfecho con la ejecutoria del equipo. "Vamos evolucionando, lo que está relacionado con tener jugadores para entrenar y competir".