El Palacio de los Deportes de Huesca fue escenario de una tarde inolvidable el pasado domingo. La Escuela de Fútbol Oscense celebró su tradicional presentación de equipos, pero esta vez con un motivo muy especial: su 30º aniversario. Más de 1.000 personas se reunieron para acompañar a los más de 500 jugadores, jugadoras, monitores y monitoras que forman parte de esta gran familia deportiva, en un ambiente cargado de emoción, alegría y gratitud.
El acto contó con la presencia de varios concejales del Ayuntamiento de Huesca, entre ellos el concejal de Deportes, Leo Carranza, quienes no dudaron en sumarse a la celebración y agradecer la labor que la escuela realiza, desde hace tres décadas, en la formación deportiva y personal de tantos jóvenes oscenses.
Uno de los momentos más emotivos de la jornada fue la lectura de un sentido discurso conmemorativo, en el que se recordó la trayectoria del club y se rindió un especial homenaje a José Ramón Buisán, alma de la EFO durante más de 20 años. Su entrega, dedicación y pasión por el fútbol base siguen siendo un faro para todos los que hoy forman parte del proyecto.
Durante la celebración, cada equipo desfiló ante el objetivo del fotógrafo Carlos Pascual, dejando constancia de su paso por esta gran familia. No faltaron los instantes simbólicos, como la tradicional foto de grupo, la entonación del himno de la escuela, regalos… y muchas sonrisas compartidas.
Como parte de la celebración, se organizó también un divertido circuito de habilidad en el que participaron varios padres y madres. El premio, un suculento jamón, había que ganárselo, y no faltaron risas, esfuerzo y alguna que otra carrera para conseguirlo.
La jornada finalizó, como es costumbre, con la esperada “chocolatada”, que puso el broche de oro a una mañana entrañable. Fue, sin duda, una celebración llena de recuerdos, ilusión y esperanza, que reafirma el valor de la EFO no solo como escuela de fútbol, sino como un verdadero hogar para muchas generaciones.
Desde la Escuela de Fútbol Oscense agradecen "de corazón a todas las personas que, a lo largo de estos 30 años, han hecho posible este proyecto. A las familias, a los jugadores y jugadoras, a los entrenadores y entrenadoras, a los colaboradores, a las instituciones y, por supuesto, a quienes ya no están pero dejaron huella imborrable. Gracias por construir con nosotros este sueño colectivo que sigue creciendo cada temporada".