Con ese cosquilleo propio del que no es un partido más, Cuco Ziganda ha comparecido en la mañana de este viernes en la sala de prensa de El Alcoraz para analizar cómo afronta su equipo la visita a La Romareda, escenario del primer derbi aragonés de la temporada ante el Real Zaragoza. “Hay una rivalidad deportiva que es muy sana y muy bonita dentro del fútbol. Huesca es una ciudad pequeña y le llega”.
Una de las preguntas obligadas a poco más de 24 horas para la disputa del choque tenía que ver con la posible presencia de Jorge Pulido tras esa fractura en la nariz sufrida el pasado miércoles en el partido ante el Andorra. “Si el médico me da el ok y Puli quiere jugar, jugará. Conociéndole a él, si le da el beneplácito el médico, creo que va a ir”, aseguraba el míster. A falta de completar el último entrenamiento esta tarde a partir de las 16:00 horas y ver cómo están los más tocados, los que por ahora están descartados son Marc Mateu y Lombardo por sendas lesiones y Juan Carlos por la roja que vio en los minutos finales ante el Andorra.
Poniendo el foco en el Zaragoza, el entrenador navarro aseveraba que este tipo de partidos “suelen ser diferentes porque hay tensión, nervios y fogosidad de inicio”. Prevé una noche “igualada, con un gran ambiente en la que se palpará esa tensión por el derbi”. Tanto el Huesca como el Zaragoza vienen en una trayectoria de “solidez”, y los blanquillos le suman el plus de haber cambiado el entrenador. “El estilo de Escribá es diferente al de Carcedo: no han perdido todavía y están muy bien estructuraros. Han cambiado bastante. Me gusta respetar, Carcedo es un grandísimo entrenador, pero juegan diferentes. Juegan muy organizados, teniendo mucho control del juego”.
Otra de las grandes dudas que existe ahora mismo en el aficionado azulgrana es el esquema que utilizará el técnico para visitar La Romareda. Ante el Andorra, sobre todo en la primera parte, se pudo ver una defensa bien marcada de cinco atrás, con Vilarrasa actuando de doble lateral izquierdo en las ayudas a Florian. Ziganda confesaba que le “tienta comenzar” con el mismo dibujo, pero “no sabemos con quién vamos a contar. En función de eso, puede variar”.
Apela a la afición azulgrana para tomar ese impulso necesario en una cita de este calibre. “Los derbis son partidos de dos semanas; en la semana previa y la posterior. Duran un poco más de tiempo que un partido normal. Es importante captar lo que es para la afición. El Huesca es un equipo con mucho orgullo, ha crecido en todos los ámbitos estructurales. Quiere ver un equipo que pelea por lo suyo y es capaz de competir. Intentaremos representar de la mejor manera a nuestra gente”. En esa misma línea hablaba de una posible sobreexcitación y contaba una anécdota que le sucedió el otro día con su vecino: “Antes del partido del Andorra me dijo que a ver si ganábamos, pero que el sábado también… Eso, sin querer, te va metiendo en el partido. Eso te hace un cosquilleo especial. Es diferente a otro partido”.
Seis puntos de 27 posibles es un registro demasiado pobre como visitante. Ziganda y los suyos quieren cortar una mala racha lejos de casa, y el de La Romareda puede ser un buen punto de partida. No cree que el fútbol haya sido “injusto” con ellos fuera, ya que “las cosas no son por casualidad”. Puntualizaba que “hay que ir a por ellas y tratar de tener esa mentalidad. Es un aspecto muy importante que tenemos que mejorar y un reto que tenemos que tener todo. Afrontarlo con más ilusión y más rabia que nunca”.
Juanjo Nieto, ¿el primero y único en llegar?
El lateral procedente del Almería Juanjo Nieto fue presentado este jueves como nuevo jugador de la SD Huesca. “Si Ángel ha dicho que no habrá salidas y ni llegadas en el mercado, él manda. Todo ok”, decía entre risas el entrenador. Sobre Juanjo, opinaba que “ya le conocemos. Es un puesto donde andamos no un pelín justos, porque hay gente que se puede adaptar a él, pero corremos el riesgo de que venga cualquier contratiempo. Pueden jugar Hugo y Jérémy, pero… Es un perfil diferente a Andrei. Es muy competitivo”.