Bajo el lema “Protege lo conquistado, gana futuro”, se ha desarrollado este jueves en Huesca la manifestación del 1º de Mayo, Día Internacional del Trabajo convocada por las organizaciones sindicales CCOO y UGT, con la participación de la HOAC y de centenares de personas.
La marcha ha sido la más temprana de la jornada. Ha comenzado en la plaza de Navarra, ha recorrido los Porches de Galicia y la calle Villahermosa, y ha concluido en la plaza López Allué, donde se ha leído el manifiesto sindical. Durante el itinerario, los asistentes han portado banderines y pancartas con la consigna principal y otras como “Cuidar el trabajo, cuidar la vida” y “Dignificar el colectivo: Trabajadores y trabajadoras de reforma y protección de menores”, una de las demandas concretas que se ha defendido este año.
En el texto leído al final del acto, las organizaciones convocantes han reafirmado su defensa de un sindicalismo comprometido, solidario y transformador, y han expresado su voluntad de seguir impulsando la cooperación entre organziaciones para la protección de los derechos laborales en un contexto global de grandes desafíos. Han recordado que el movimiento sindical sigue siendo una herramienta clave para avanzar hacia sociedades más equitativas y democráticas.
Asimismo, se ha rendido homenaje a quienes sufren persecución o han perdido la vida por defender los derechos sociales, y se ha trasladado la solidaridad con los pueblos que viven bajo represión, ocupación militar o conflicto armado. En este sentido, se ha denunciado la continuidad de la guerra en Ucrania tras la ofensiva rusa, y se ha exigido el cese de la ocupación de los territorios palestinos, condenando los ataques sobre Gaza y Cisjordania.
Según se ha expresado, la pasividad de la comunidad internacional está permitiendo al gobierno de Netanyahu vulnerar el derecho internacional, y se ha reiterado el respaldo al reconocimiento de un Estado palestino que pueda convivir en paz y seguridad junto a Israel.
En materia económica, los sindicatos han advertido sobre el impacto negativo de la "guerra comercial" iniciada por la administración Trump, y han apelado a una respuesta cohesionada por parte de la Unión Europea.
Frente al auge de la ultraderecha, han denunciado su oposición a los servicios públicos, las políticas de igualdad, la diversidad y la acción climática, así como su hostilidad hacia el proyecto europeo. Ante ello, han defendido la necesidad de construir una Europa más fuerte y unida, que priorice la justicia social, combata las desigualdades y promueva la inversión pública para la creación de empleo de calidad.
Entre las prioridades señaladas en el manifiesto se encuentran el impulso de la transición energética, la innovación tecnológica y el fortalecimiento del tejido productivo, siempre con la participación activa del sindicalismo de clase como pilar de la democracia y la cohesión social.
A nivel estatal, las organizaciones han subrayado la importancia de mantener el diálogo social para consolidar un empleo digno, revalorizar los salarios mediante la negociación colectiva, garantizar el acceso a la vivienda -con especial atención a la juventud- y avanzar en igualdad de género y en la erradicación de la violencia machista.
También han instado al Ejecutivo a llevar al Parlamento el acuerdo que establece una jornada laboral máxima de 37,5 horas semanales, con el fin de mejorar la calidad de vida de la clase trabajadora.
El manifiesto finaliza con un llamamiento a la movilización en defensa de los derechos sociales y laborales, y del proyecto europeo como pilar de democracia, convivencia y progreso:
Ahora más que nunca, es necesario proteger lo conquistado y movilizarnos para ganar el futuro:
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Por la reducción de jornada, para ganar tiempo de vida
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Por los salarios, para ganar estabilidad
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Por el feminismo, para ganar igualdad
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Por la igualdad, para ganar libertad
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Por la negociación colectiva, para ganar derechos laborales
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Por la salud laboral, para ganar calidad de vida
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Por el sindicalismo, para ganar democracia
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Por la democracia, para poder respirar
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Por las pensiones, los cuidados, la educación y la sanidad públicas, para ganar bienestar
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Por la industria y el campo, para ganar economía productiva
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Por la vivienda, para ganar autonomía
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Por la cultura, para ganar pensamiento crítico
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Por los derechos humanos, para ganar solidaridad
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Por la solidaridad, para ganar seguridad
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Por una Europa social contra la barbarie externa e interna
A POR LAS 32 HORAS
José Antonio Alentá, secretario territorial de Servicios Públicos de UGT en la provincia, ha reivindicado la movilización como vía para defender las conquistas sociales. “Hemos tenido que salir a la calle para que no nos quiten nuestros derechos”, ha señalado.
Alentá ha repasado las principales demandas planteadas por el sindicato. Ha subrayado que se han conseguido las 37,5 horas semanales sin que los partidos políticos hayan puesto trabas, y ha mencionado especialmente el papel del Partido Popular, del que ha dicho que “a veces no ha sabido muy bien dónde está”.
También ha resaltado que se ha logrado avanzar en mejoras salariales a través de la negociación colectiva. En materia de vivienda, ha remarcado la necesidad de garantizar su acceso a todas las personas, independientemente de su nivel de ingresos, edad o situación migratoria. “Que todos hayan tenido capacidad para poder llegar a tener una vivienda propia”, ha recalcado.
Además, ha defendido la implantación de planes de igualdad en las empresas y el impulso de medidas específicas para el colectivo LGTBI. Ha insistido en que ha sido necesaria una inversión en vivienda pública y que “otra de las causas, la última pero no menos importante, ha sido haber recuperado la brecha salarial e implantado planes de igualdad en todas las empresas, lo cual ha costado en algunas”.
En cuanto a la situación en la provincia, ha señalado que ya se ha logrado aplicar la jornada de 35 horas en muchas entidades locales, mientras que en otras se ha fijado en 37,5, dependiendo de los convenios. Ha apuntado que las negociaciones han sido dispares: “Algunos se han firmado sin tantos problemas y otros se han quedado más parados porque hasta que no ha habido un acuerdo claro con la patronal, ellos han mantenido su cuota. Nosotros hemos ido con la nuestra y al final se ha tenido que llegar a un acuerdo”, ha explicado.
Respecto a los salarios, ha indicado que las subidas han variado según los sectores. Como ejemplo, ha mencionado el Convenio de Educación Especial, firmado a nivel estatal, que ha supuesto un incremento del 10%, con aumentos adicionales del 2,5% en los años siguientes. “En la mayoría de los convenios que hemos firmado, la subida salarial sí que ha sido importante”, ha concluido. También ha recordado que el sindicato ha apostado por avanzar hacia las 32 horas semanales como objetivo de futuro.
EDUCADORES SOCIALES
osé Vegas Grau, secretario general de Comisiones Obreras en Huesca Occidental, ha centrado su intervención del Primero de Mayo en la necesidad urgente de reducir la jornada laboral. “La reivindicación principal ha sido la reducción de la jornada laboral a las 30 y 37,5 horas, y esto hay que visibilizarlo”, ha afirmado.
Vegas ha denunciado la proliferación de desinformación por parte de determinados sectores. Ha señalado que se han difundido falsedades desde la patronal y la extrema derecha sobre las consecuencias de la reducción horaria, y ha insistido en la importancia de desmentirlas. “Ya lo hemos podido ver con el salario mínimo interprofesional: cuando se ha incrementado, los niveles de productividad de las empresas se han visto mejorados y no ha habido ningún problema”, ha explicado. “Ha sido perfectamente absorbible y somos más competitivos”, ha añadido.
Durante su intervención, también ha reivindicado el derecho a la conciliación entre la vida personal y la profesional, más allá del acceso a un salario digno o a la vivienda. “Las personas trabajadoras, más allá de tener salarios dignos y poder acceder a la vivienda, necesitamos también poder conciliar la vida laboral y familiar”, ha subrayado. En esa línea, ha criticado la vigencia de un modelo social que, en su opinión, ha quedado superado: “Venimos de un modelo social que ha caducado, no podemos seguir contando con el rol de la mujer para el cuidado”, ha lamentado.
Por ello, ha defendido un reparto equitativo del tiempo de cuidados: “Todas las personas trabajadoras, con independencia de su género, tengan tiempo y disposición para cuidar a sus mayores y a sus menores, porque es importante y es principal”, ha concluido.
Asimismo, ha alertado sobre los riesgos de no avanzar en cuestiones laborales fundamentales. “Si no conseguimos este avance social, como la reducción de la jornada laboral, volvemos al sistema que tenemos actualmente, que es de precarización”, ha advertido. “Y al final quien se precariza es el salario más flojo de la casa, que por desgracia, suele ser el de la mujer”, ha denunciado, recordando que este tema es una de las principales luchas que están llevando a cabo en la negociación colectiva.
Respecto a los derechos ya conquistados, Vegas ha sido rotundo: “Siempre están en peligro. Damos por hecho todo. Lo hemos podido ver el otro día con el apagón”.
Ha insistido en que los derechos sociales y laborales están en constante riesgo: “Somos muy frágiles, y esto ocurre con el sistema energético, el económico, el de trabajo y con los derechos que tenemos”. Por eso, ha subrayado la necesidad de “defender lo que ya hemos conseguido, que tanto ha costado, y sobre todo avanzar, porque si no hay avance, no hay mejora”.
Una de las particularidades de este 1º de Mayo en Huesca ha sido poner el foco en un conflicto específico: el de los y las educadoras sociales. “Vamos a visibilizar aquí en la manifestación el conflicto que hay con un colectivo que tiene muchos problemas para poder prestar su trabajo y su servicio”, ha señalado.
“Estas personas trabajan para integrar a menores que, por circunstancias ajenas a ellos, se ven completamente desprotegidos. Y estos trabajadores y trabajadoras necesitan protección y medios adecuados para poder desempeñar su trabajo”, ha remarcado.
AVANCES CON SÁNCHEZ
Marcel Iglesias, miembro de la Comisión Ejecutiva del PSOE en el Alto Aragón, ha participado en la manifestación del Primero de Mayo para mostrar el respaldo del partido al movimiento sindical. “Desde el Partido Socialista hemos venido a la manifestación del 1 de mayo como todos los años, para apoyar al movimiento obrero y también la labor que hacen los sindicatos de clase aquí en nuestra provincia”, ha afirmado.
Iglesias ha subrayado que esa lucha es compartida: “Para reivindicar a todas aquellas personas que durante generaciones han trabajado junto con el Partido Socialista por los derechos de los trabajadores y trabajadoras de nuestro país”.
En esta edición del Primero de Mayo, Marcel Iglesias ha destacado la gestión del Gobierno en el ámbito laboral, subrayando los progresos alcanzados. “Este año hemos querido reivindicar toda la labor que se ha hecho en materia laboral y todos los avances que se han conseguido”, ha expresado. Asimismo, ha enfatizado que el Ejecutivo encabezado por Pedro Sánchez ha mantenido “un importante diálogo social”, mencionando las medidas esenciales adoptadas en tiempos difíciles.
Iglesias ha citado algunas de esas medidas, como los ERTES durante la crisis sanitaria, el incremento histórico del salario mínimo interprofesional y los permisos retribuidos en situaciones de urgencia, como el apagón reciente o la DANA en Valencia. “Todas estas iniciativas del Partido Socialista han contrastado con la derecha radical y reaccionaria que representa el Partido Popular y Azcón aquí en Aragón”, ha señalado.
Finalmente, Iglesias ha reafirmado el compromiso del PSOE con la protección y el progreso de los derechos laborales: “Nosotros, como Partido Socialista, lo tenemos claro: hay que seguir avanzando en derechos laborales y garantizar los derechos de los trabajadores que ya tenemos”, ha concluido.