La Confederación de Empresarios de Aragón (CEOE-Aragón) estima una reducción de la actividad económica en la región de alrededor de 1.500 millones de euros debido a la ausencia de precipitaciones en unos meses cruciales para los cultivos y la falta de una estructura suficiente que permita embalsar agua en periodos de mayor abundancia de lluvias.
Así lo ha valorado el Comité Ejecutivo de CEOE Aragón, reunido este jueves, que contempla en este descenso la incidencia de ambos factores sobre la disponibilidad de agua, que afecta gravemente tanto en el sector agrícola y ganadero como en la industria agroalimentaria y química, y el transporte, en la actividad ligada a este sector primario y de transformación.
José Fernando Luna, presidente de CEOE CEPYME Huesca ha explicado que la fuerte reducción de producción en cereales, oleaginosas y leguminosas, va a tener también un gran efecto sobre la autosuficiencia española para la alimentación animal, obligando a importar de terceros países un mucho mayor porcentaje de la misma (cereal, maíz, guisantes, alfalfa).
De esta forma, ha señalado, se reduce la soberanía alimentaria nacional, con el consiguiente impacto que puede producirse en precios y seguridad de suministros.