"Creo que tuve mucha suerte al ser de Huesca"

Rafael Fidalgo Ciprés ha recibido un homenaje en el acto de reconocimiento a los oscenses en el exterior

14 de Agosto de 2022
Guardar
Homenaje a Rafael Fidalgo Ciprés: "Creo que tuve mucha suerte al ser de Huesca"

Vivir fuera de tu lugar de cuna, del pueblo o ciudad donde has hecho los primeros amigos, algunas veces los mejores, donde yacen tus antepasados, donde adquiriste los valores que forjaron tu carácter y te acompañan se lleva con más o menos nostalgia, pero volver siempre es una alegría y un deseo que se repite con cierta cadencia.

Rafael Fidalgo Ciprés es uno de esos altoaragoneses que llevan la ciudad de Huesca impresa en su corazón, aunque reconoce que tuvo mucha suerte al recalar en otra gran ciudad, Oviedo, en la que ha forjado una gran familia, que le ha hecho ya hasta bisabuelo.

El Ayuntamiento de Huesca le ha brindado este domingo un homenaje, con motivo del acto de reconocimiento a los oscenses en el exterior, que se comenzó a celebrar hace solo unos años. A esta cita se han sumado otras decenas de oscenses que, como él, dejaron un día la capital altoaragonesa para emprender un proyecto vital en otro lugar de la tierra.

Rafael Fidalgo Ciprés fue jugador del Huesca en las temporadas 62-63 y 63-64 y antes lo fue de Lamusa, por eso no es de extrañar que algunos de sus mejores recuerdos tengan que ver con el fútbol y que siga con interés las "batallas" que se libran en El Alcoraz. Pero, además, el estadio supone para él un punto de referencia de otros parajes que le resultan muy emblemáticos. Ha paseado "mil veces" por la arboleda que crece junto al campo, la ermita de Loreto es importante para él, en el cementerio están enterrados sus padres, sus abuelos y dos hermanos y también jugó en el campo de San Jorge. "Fíjate todo lo que hay alrededor del Huesca, lo veo todo", ha observado.

"Por cierto -ha añadido-, sé que hay un jugador de Huesca en el Oviedo (Dani Calvo), tengo que ir a verlo". Rafael Fidalgo fichó por el Langreo y después por el Oviedo. Se casó en Asturias y allí se quedó. El 1 de septiembre cumplirá 78 años.

Roberto Ciria canta el S'ha feito de nuey

Su hermano reside en Huesca y aquí tiene "las mejores amistades, amigos como hermanos", y por eso acude a su ciudad natal con regularidad, aunque la pandemia de covid le privó de hacerlo en estos dos últimos años. Cuando regresa, se pasea por la calle Lanuza, donde residió 18 años, y la iglesia de Santo Domingo, donde le bautizaron, y recorre el Coso Alto, el Coso Bajo y los Porches de Galicia. De Huesca lo sabe "todo", gracias a la tele y al móvil, que lo "controla" muy bien.

"Echo de menos Huesca, ¿cómo no la voy a echar de menos?", suspira, "y eso que Asturias es un sitio con muy buena gente. Creo que tuvo mucha suerte al ser de Huesca, vivir veinte años y luego ir a Asturias y hacer una familia maravillosa", ha concluido. 

El acto ha contado con la presencia del alcalde de Huesca, Luis Felipe, el concejal de Cultura, Ramón Lasaosa, otros miembros de la corporación y otros oscenses que viven fuera de Huesca. También ha intervenido el jotero Roberto Ciria, con tres piezas, entre ellas una de Gregoria Ciprés y la siempre emocionante S'ha feito de nuey. De hecho, Roberto Ciria le ha dicho a Rafael Fidalgo que conoció a su madre, la gran jotera Gregoria Ciprés, que además de ser "un encanto de mujer", destacó "por lo bien que cantaba" y, además, "por su humildad".

la información, es hijo de la gran jotera Gregoria Ciprés, y su nieto Álvaro Fidalgo es un gran jugador de fútbol, actualmente en el America de México.

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante