Entre las manos

María José Gutiérrez Lera
15 de Agosto de 2023
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Oscenses y visitantes se arreglan con sus mejores galas. Foto Jacques Valat
Oscenses y visitantes se arreglan con sus mejores galas. Foto Jacques Valat

Durante estas fiestas, María José Gutiérrez Lera nos ha ofrecido su visión particular de San Lorenzo a través de cartas al santo ilustradas con fotografías de Jacques Valat.

Con esta se cierra este ciclo epistolar. María José Gutiérrez es escritora y se espera la edición de su primera trilogía de literatura fantástica.

Huesca, 15 de agosto de 2023

Querido San Lorenzo:

Qué hermosa se ve Huesca el día de la Ofrenda. Con esmero y paciencia, cientos de aragoneses y visitantes se arreglan con sus mejores galas para acercarse hasta ti y llevarte un detalle de agradecimiento; toda la riqueza y vistosidad de la provincia de Huesca se ve representada en los grupos de personas que recorren nuestras calles para honrarte.

Cuando yo era niña, recuerdo que había menos flores y más frutos; aún me acuerdo de mi hermano mayor todo orgulloso con unas ristras de chorizo y un pan en las alforjas y, otro año, llevando un conejo. ¡Qué importantes nos sentíamos!

Supongo que los tiempos han cambiado y ahora predominan los claveles blancos y los ramos de olorosa albahaca que luego embellecen la puerta de tu templo. Pero la esencia es la misma, unirnos en la alegría de regalar, a través de ti, bienes materiales a los más desfavorecidos y espirituales a todo el que quiera disfrutar del espectáculo de tradición, saber hacer artesano, música y danzas que hoy salen a la calle por ti.

Mira las manos de todos esos niños y mayores, San Lorenzo, con qué cariño sujetan cestas y gavillas. Piensa en las que, antes, han bordado bobinés, cosido enaguas, faldas, camisas y calzones, planchado mantones, ajustado fajas y cachirulos para que no se caigan. Contempla las que hacen gestos amables, las que se tienden para guiar a los chiquitines, las que rasgan las cuerdas de las guitarras, las que tocan las castañuelas, las que se elevan al cielo para bailar. Observa las que engarzan las flores en los ramos, las que colocan los frutos en las capachas; las que peinan, las que alisan, las que retocan. Escucha las que aplauden. Sonríe a las que se juntan para rezar.

Toda la devoción a ti pasa hoy, San Lorenzo, por nuestras manos. Por los colores, las texturas, los sonidos, los sabores y el esplendor visual que tantos dedos aragoneses se han esmerado en poner a punto.

Feliz ofrenda, San Lorenzo.

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