Dominical de vaquillas en la Plaza de Toros de Huesca con lleno nuevamente en las gradas -la excepción de cada mañana del rincón donde da el sol- y con el mismo tenor que las jornadas anteriores, aunque el resultado del parte mëdico no aloja ningún traumatismo de consideración.
Sí que ha habido abundantes atropellos de las vacas que tan sólo se han cobrado una atención de cierto calado, un joven que tenía dificultades para respirar y ha sido trasladado a San Jorge ante la eventualidad de que tuviera afectada alguna costilla.
Por lo demás, ha habido acciones espectaculares, con buenos recortadores, con algunos temerarios y con saltos de las vaquillas que, en un caso, prácticamente ha aprehendido a su pieza ya dentro del callejón para reintroducirlo en la plaza. Afortunadamente, sustos sin consecuencias serias.