A policías y guardias civiles pueden prometerles y les prometen

10 de Mayo de 2023
Guardar

Debe ser jodido. Perdón por el exabrupto. Pero debe ser jodido. Que te pongan como ejemplo en todos los discursos institucionales. De todos, porque de otro modo no puede ser. Que te metan en el discurso electoral porque unos aseguran que hay pocos y otros que les han reforzado. Ellos saben la verdad. Son muchos menos de los que debieran, por más que su vocación multiplique los rendimientos. Que seas considerado el mejor cuerpo policial del mundo y, sin embargo, seas el peor pagado junto a tus 'hermanos de azul', también valorados internacionalmente. Porque los de rojo y los de azul periféricos, coronados por boina porque su riesgo se reduce por razón de supremacismo de sus conciudadanos. Que te juntes con ellos y algunos te miren de arriba hacia abajo.

Debe deprimir mucho. Aparecer en las notas oficiales con el empecinamiento en que todos están hermanados y, de hecho, es la cooperación de los diferentes cuerpos la que permite las más rutilantes operaciones, la desarticulación de las principales bandas de delincuentes, la intervención de toneladas de estupefacientes, la salvación de vidas humanas frente a los más salvajes criminales. Luego, además, conscientes de que los dos cuerpos han sufrido el mayor número de bajas de manos de los terroristas, soportan que los asesinos no sólo son recibidos con algarabía en sus pueblos tras recoger los beneficios penitenciarios por buena conducta (macabra paradoja) sino que además pueden presentarse para ser elegidos con las manos llenas de sangre. Sí, como dijo la madre de Pagazaurtundúa, nos hielan el corazón.

Este miércoles se han manifestado ante el Congreso de los Diputados. Ante la indiferencia de sus señorías. Sin el agasajo de miles y miles de ciudadanos que debieran salir con ellos, como un solo cuerpo. Y, sin embargo, salen a la calle a proclamar su razón y su justicia. A defender a los suyos, perjudicados porque la jubilación será más rácana que la de muchos otros funcionarios almibarados que lo más peligroso que han hecho en su vida es poner la mano cerca de la grapadora. Venciendo la impotencia de escuchar durante lustros que sus sueldos van a ser equiparados. Porque pueden prometer y prometen y, a la hora de la verdad, tienen la suerte de que los agentes del orden escogen entre todas sus prioridades las de defendernos a todos.

Porque ellos sí que aman a su país. Porque ellos sí que sustentan la integridad del Estado de Derecho. Aunque Moncloa y todas las Moncloas que ha habido, Marlasca y todos los marlascas, se les rían a la cara. Indigentes intelectuales y, sobre todo, éticos todos ellos. Yo, desde luego, creo en mis guardias civiles y mis policías. Y siempre estaré a su lado. Denunciando la miseria moral de los mentirosos. De los incumplidores.

 

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante