Corriendo entre perseidas

Isamar Gutiérrez Ariño
02 de Junio de 2025
Guardar

Me levanto con la noticia de que ha fallecido José Armisén, uno de los “señores del atletismo” de Huesca al que todos califican de “hombre bueno”. No lo conocí, pero teníamos a alguien en común: José Ariño, mi abuelo. Ambos, junto con Miguel Ángel Martín, fueron pioneros de la Carrera de Navidad, una aventura del running desde el camping de San Jorge que hoy, más que una tradición, es toda una institución deportiva en Huesca.

No puedo evitar sentir nostalgia del pasado cuando quienes han formado parte de él se van yendo. Cada 8 de mayo, aniversario de la partida de mi abuelo, sus hijos y nietos ponemos un recordatorio en las redes sociales, pero como dice mi madre Isabel Ariño, “todos los días me acuerdo de mi padre”.

Siempre está presente, en la prodigiosa memoria de Lourdes Laviña, su mujer, en los escritos que nos dejó, en nuestra propia huella genética. Describir con palabras a mi abuelo se me hace imposible, porque son insuficientes, pero sólo sé que era una buena persona. Los hombres buenos terminan juntándose, y el deporte es un buen motivo para ello. Seguro que los tres amigos no podían imaginar que una carrerita planeada para bajar los excesos de la

Navidad, mezclada con esa pasión por la naturaleza que los oscenses llevamos impronta en la sangre, terminaría formando parte de la historia de Huesca. El patrimonio de una ciudad no son sólo las iglesias, la escultura, la platería o los edificios. La verdadera memoria de una ciudad la crean quienes viven en ella, mediante sus aportaciones, sus costumbres y su transitar por sus calles, y quienes han pasado antes nos la dejan a los que venimos después para seguir construyéndola. Necesitamos sus recuerdos para saber quiénes somos. Y cogemos los hilos que dejaron para continuar tejiendo nuestra historia en blanco y verde.

La familia de José Armisén tendrá a partir de ahora un día señalado para recordarle con cariño. La familia Ariño Laviña seguiremos evocando a nuestro José. Porque rememorar es mantenerlos aquí.

Y ahora, los dos amigos, los dos hombres buenos, José Ariño y José Armisén, nos verán continuar con su tradición cada 25 de Diciembre, mientras ellos vuelven a correr juntos entre perseidas

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante