Hace poco más de un mes que todos los contertulios y todas las columnas de opinión criticaban el plan del presidente argentino sobre la desregularización de la economía. Como si estuviéramos para dar lecciones. España es el cuarto país con mayor pobreza de la Unión Europea, sólo superada por Rumanía, Bulgaria y Grecia. Aunque este dato no es el peor de la economía. En pobreza infantil estamos en el pódium, sólo nos superan Bulgaria y Rumanía. Por ello, tras ver que los primeros datos muestran que la idea de Javier Milei está teniendo resultados positivos en Argentina, me propongo señalar que si en España se desregularizara, estaríamos mejor.
¿Por qué pongo el foco en la desregularización? Porque mientras el resto de Europa ha mejorado con respecto a hace un lustro, nuestros datos han ido a peor. Mientras que Rumanía, Bulgaria y Grecia han mejorado o se han mantenido estables, los españoles llevamos 5 años en caída libre.
Algunos podrán señalar como culpables de esta situación a la crisis sanitaria del COVID, a la Guerra de Ucrania o al bloqueo del Mar Rojo. Sin embargo ¿No afectó el COVID también a Bulgaria, Grecia y Rumanía? ¿La Guerra de Ucrania sólo incide en la economía española?
Seamos sinceros, quitémonos la venda de los ojos, si España se está empobreciendo es porque nuestros gobernantes lo han decidido. Los políticos se han arrogado ciertas decisiones que afectan al conjunto de la sociedad. Son lo que he denominado “Tonterías selectas de la economía española”, o dicho de un modo más mundano, los “tiros en el pie” que nos pega la clase política. Y lean claramente mis palabras, el tiro nos lo pegan ellos a nosotros, pues las consecuencias las pagamos todos menos ellos.
Una tontería que nos empobrece es la prohibición del fracking en España. La primera herramienta para que salgan adelante estas tonterías es la desinformación. La gente no sabe lo que es el fracking, ni el impacto que tendría. Por supuesto que esta manera de sacar petróleo o gas natural tiene sus riesgos. Si leen informes de Greenpeace o cualquier asociación ecologista, remarcarán esos riesgos. Aunque no les dirán que esos riesgos son teóricos y que, en los yacimientos de fracking, no ha ocurrido nada de lo que ellos predicen.
El fracking en España generaría 160.000 puestos de trabajo. El número de personas paradas en España ronda las 2.700.000. Y se estima que podamos llegar a rozar los tres millones en el próximo bienio.
El fracking en España asentaría puestos de trabajos en provincias como Asturias, Cantabria, Burgos y el Pirineo Navarro. Es decir, crearía puestos de trabajos en zonas despobladas.
El fracking en España incrementaría el PIB de media un 1% anual, llegando a alcanzar en algunos años el 4%. España está en recesión desde finales del 2023 y en este 2024 y en el 2025 vendrá otra crisis (sí, una más tras la del 2008 y la del COVID).
El fracking en España reduciría nuestra dependencia del extranjero y lograría que durante 20 años no comprásemos ni gas ni petróleo al extranjero. Ahora estamos a expensas de Rusia. Pero incluso aunque nos guste depender del exterior ¿Cuánto han pagado este mes de calefacción? ¿Y el precio de la gasolina? ¿Y cómo va eso de llenar el carrito de la compra? El fracking reduciría todas esas tensiones en los precios.
Se han reído de la desregularización de Javier Milei. Pero, en nuestro país, la regularización nos empobrece más cada día y no hacemos nada. Esta semana Javier Milei ha ganado el premio Juan de Mariana por la defensa de la libertad ¿Qué premios han ganado nuestros dirigentes?