Tres años sin Manuel Sarasa

Irene San José
27 de Mayo de 2023
Guardar

Tres años sin ti.
La vida se acabó, se fue por la rendija de la muerte. Pero no todo se terminó entonces, todo cambió, eso sí. La ausencia pesa, la conversación quedó interrumpida, el recuerdo no. De eso va esta carta, amor mío, de recuerdos. Esos que nos hacen ser. Porque no somos nada si no podemos recordar. Y es que todo lo hacemos de “memoria”: hablar, andar, conocer… El recuerdo nos da identidad.

A ti te preocupaba la memoria ¿dónde está la memoria? Un anatomista como tú quería saber en qué lugar del cerebro está. Y entonces conociste el alzhéimer. Ese que la destruye y con ella lo que somos. Mal enemigo es el alzhéimer para quien se lo encuentra. Al igual que ladrón lo sigue, lo espía y agazapado espera para dejarle sin nada, sin si mismo.

La buena noticia, de estos tres años sin ti, es que tu esfuerzo y lucha contra el alzhéimer no se han acabado. Tú equipo de Araclon sigue, el estudio clínico que dejaste en marcha sigue. Ha terminado la fase ll, y con buenos resultados. Sí, los resultados de la fase ll son los esperados y sí, se confirma la seguridad de la vacuna: no se han dado efectos secundarios, relevantes, en ningún paciente.

Está claro, se puede continuar con el estudio clínico. ¿Te acuerdas? Siempre dijiste que nunca embarcarías a nadie en una fase lll si no estabas convencido de que los resultados de la fase ll daban pie a creer que la vacuna podía ir adelante. Estos resultados dan pie a seguir creyendo en la vacuna. Tú seguirías convencido de ello.

Manuel Sarasa
Manuel Sarasa

Pero, sí hay un pero, la fase lll es muy ambiciosa, hacen falta muchos pacientes y paciencia para verla terminar. Ese no es el problema, claro está. Desgraciadamente candidatos al ensayo no faltan, paciencia, a los que están en ciencia no puede faltarles. El problema es el de siempre: volvemos a la casilla de partida. ¿Te acuerdas? Ya hemos estado otras veces en esta casilla, en la de: “falta financiación”, ese pulmón económico que nos de aire para seguir respirando.

Si estuvieras aquí nada me preocuparía, y es que, aunque lo dejaste todo bien planificado, falta tu empuje y tu fuerza para encontrar ese apoyo económico que haga que no se pierda en el olvido una vacuna, que como tú dirías: pinta que puede ser una ayuda importante a la solución contra la enfermedad de Alzheimer. Queda nuestro empuje, el mío y el de tus hijos, el de tu equipo y el de muchos que aún creen en ti. Dios mediante, encontraremos la salida.

Archivado en

Suscríbete a Diario de Huesca
Suscríbete a Diario de Huesca
Apoya el periodismo independiente de tu provincia, suscríbete al Club del amigo militante