El programa ‘Equal Campus Urbanus’ ha celebrado una nueva edición en Huesca del 7 al 18 de julio, consolidándose como un espacio pionero de encuentro entre generaciones. Por primera vez, esta propuesta municipal ha reunido a 12 chicas y chicos junto a 8 personas mayores de 60 años para convivir, aprender y crear juntas en un entorno de igualdad, colaboración y participación ciudadana.
Durante las dos semanas de duración del campus, promovido por los servicios municipales de Igualdad y Participación Ciudadana en colaboración con la Plataforma de Voluntariado de Aragón, se desarrollaron proyectos conjuntos con un enfoque social, educativo y creativo.
En la primera semana, el grupo intergeneracional diseñó una “caja de emergencias” bajo el título “72 horas”, un recurso informativo en formato tríptico pensado para ser útil en situaciones de crisis a jóvenes, familias y personas mayores. El contenido fue creado por el grupo senior y validado por el grupo joven. Esta guía se empezará a difundir en septiembre dentro del programa municipal “Género y Salud” y se extenderá a entornos educativos y comunitarios.
Simultáneamente, el grupo joven ofreció formación tecnológica personalizada a los mayores mediante sesiones prácticas que reforzaron sus competencias digitales, en una experiencia de aprendizaje cruzado que se prolongará durante el curso escolar con nuevas propuestas.
La segunda semana se centró en el Camino de Santiago a su paso por Huesca, que se convirtió en un proyecto común de gamificación educativa y ciudadana. Analizando el perfil del público objetivo, se diseñaron propuestas de información y ocio. Una de las sesiones fue liderada por una joven estudiante de Diseño de Producto, participante en ediciones anteriores, que próximamente realizará prácticas en el propio servicio municipal de Igualdad y Participación.
‘Equal Campus Urbanus’, nacido en 2019 como un espacio formativo para jóvenes, da un paso más en 2025 al integrar activamente a personas mayores en un formato intergeneracional y transformador, fomentando el respeto mutuo y el aprendizaje colaborativo.
El compromiso de quienes han participado no termina con el campus: tanto el grupo joven como el senior están convocados para colaborar como voluntariado social en actividades municipales, como los próximos talleres del Punto Violeta previos a las Fiestas de San Lorenzo.