Cáritas Diocesana de Huesca ha celebrado este sábado 29 de noviembre su Asamblea General, evento trienal que mostrba la fortaleza de la entidad, en un acto que disfrutó de la presencia del obispo Pedro Aguado, quien presidía la Asamblea junto al director de Cáritas Diocesana de Huesca, José Antonio Torres, y al que asistieron unas 80 personas, entre trabajadores, párrocos, simpatizantes y un elevado número de voluntarios.
Se presentaron los informes del periodo 2022-2025 de la parte económica y de actividad que fueron presentados por el administrador Antonio Aínsa y José Antonio Torres, respectivamente, con la evolución de Cáritas Huesca y a continuación se presentaba el documento de objetivos y programaciones para el próximo trienio que fue aprobado por unanimidad.
El obispo, la secretaria general, Isabel Ramos, y varias personas contaron cómo las acciones se van a hacer experiencias a lo largo del tiempo durante los próximos tres años. La expresión gráfica fue la de pequeños gestos, como un corazón o unas gafas, que representaban las diferentes acciones. “Nos quedamos con sensaciones muy positivas. Ha habido una gran participación y consenso con las acciones a impulsar en los próximos años”, recalca Isabel Ramos.
PRIORIDADES
En el informe la persona se erige como centro del acompañamiento que se hace desde Cáritas Huesca y se pone sobre la mesa tres prioridades: fortalecer la identidad cristiana, impulsar el enfoque de derechos y asegurar la sostenibilidad.
Cáritas Huesca considera que la identidad cristiana es lo que da sentido al compromiso comunitario y la transformación social, definiéndose como una comunidad impulsada por el amor al prójimo y el compromiso con la justicia; el enfoque de derechos reconoce la dignidad y los derechos de cada individuo, especialmente de quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad, considerándolos sujetos activos con capacidad transformadora.
Estima la organización que hay que asegurar la sostenibilidad con una gestión transparente, un compromiso compartido y una comunicación comprometedora. Es el medio necesario para garantizar que el amor comprometido se mantenga en el tiempo de manera integral: no solo económica, sino como la capacidad de sostener la acción social con eficiencia, responsabilidad y un impacto duradero. Durante la Asamblea, los asistentes tuvieron un descanso donde pudieron disfrutar de un ágape preparado por Carinsertas, empresa de inserción socio laboral de Cáritas Diocesana de Huesca.