José Alegre Vilas ha fallecido en el Monasterio de Poblet después de una corta e inesperada enfermedad en el recinto monástico en el que residía después de una vida religiosa prolongada y fructífera, y ha dejado una estela de tristeza en su Ballobar natal en el que vio la luz en 1940.
José Alegre estudió Magisterio y se ordenó sacerdote el 18 de marzo de 1970 tras estudiar en el Seminario de Zaragoza. Ofició el sacerdocio en Alcañiz. Ingresó en el monasterio de Santa María de Poblet en 1995 y el 26 de enero siguiente vistió el hábito de novicio, y profesó el 25 de enero de 1997. El 20 de abril de 1998 fue elegido abad por la comunidad de Poblet y recibió la bendición abacial el 27 de junio siguiente por el arzobispo tarraconense Luis Martínez Sistach.
Fue, en su condición de abad, presidente nato de los monasterios de la Congregación Cisterciense de la Corona de Aragón: los cenobios femeninos de Santa María de Vallbona de les Monges, Santa María de Valldonzella en Barcelona y el masculino de Santa María de Solius.
Ha destacado, desde sus conocimientos como licenciado en Teología, como autor de obras enmarcadas en la espiritualidad, además del Diccionario de la Historia Eclesiástica de Cataluña.
El 3 de diciembre de 2015, pasó a ser abad emérito tras ser sucedido por Octavi Vilá.
Como explica la alcaldesa de Ballobar, José Alegre Vilas visitaba asiduamente su pueblo natal, donde se crio en el seno de una familia compuesta junto a sus padres por tres hermanos y una hermana. "Era una persona muy afable, agradable, muy inteligente y además discreto". No oficiaba misa en la localidad salvo que alguien, por amistad o familia, le pidiera que celebrara la eucaristía en la iglesia ballobarina.
La parroquia, encabezada por su titular, Rafael Carrasquer, ha fletado un autobús para este lunes, en que se realizará su funeral a las 10 de la mañana en el Monasterio de Poblet, que presidirá Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española.