El Ayuntamiento de Barbastro ha conmemorado este 25 de mayo el 50 aniversario de la concesión de la Medalla de Oro de la Ciudad a San Josemaría Escrivá (1902-1975) con un acto multitudinario en el Salón de Plenos, el mismo lugar en el que el entonces alcalde de Barbastro (Manuel Gómez Padrós) reconoció al sacerdote fundador del Opus Dei , nacido el 9 de enero de 1902 en la ciudad del Vero.
La conmemoración, presidida por Fernando Torres, ha contado con la presencia del vicario regional del Opus Dei Ignacio Barrera, el delegado territorial del Gobierno de Aragón en Huesca Javier Betorz, el diputado en Cortes José Pedro Sierra, la diputada provincial María José Vicente, los concejales del equipo de gobierno Blanca Galindo, Silvia Ramírez y Javier Garcés, la vicepresidenta de la Comarca Carmen Obis y la concejal Raquel Latre, entre otras autoridades. También han estado presentes miembros de Patronato del Santuario.
El Salón de Plenos se ha quedado pequeño para acoger a los numerosos barbastrenses y vecinos de otras localidades que han querido participar en la conmemoración. El obispo de Barbastro, Ángel Pérez Pueyo, no ha podido estar presente y, en representación del Obispado, ha asistido las Delegada Diocesana de Celebración, Silvia Peropadre.
Testigos presentes hace 50 años, como el periodista Ángel Huguet y Conchita Cremades Sanz-Pastor, han recobrado aquellas escenas.
Ha recuperado la figura del santo Alegría Pintado, la historiadora y hostelera Ana Mur, el analista financiero José Manuel Puértolas, la docente Isabel Berges y Mónica Herrero, barbastrense y vicerrectora de Comunicación de la Universidad de Navarra, que ha ofrecido una breve disertación sobre la figura del santo titulada ‘Savia y raíces de un santo barbastrense’.
Fernando Torres, que ha cerrado el acto, ha destacado el valor universal de la figura de San Josemaría Escrivá de Balaguer, que trasciende lo religioso y prestigia toda vía más la ciudad en tanto que hijo ilustre de la capital del Vero. En la conmemoración se ha contado con materiales informativos de la época, como el audio con las palabras del galardonado. Además, se ha proyectado un vídeo realizado por el barbastrense Javier Armisén en el que, sobre el audio original del día de la concesión de la medalla, se han mostrado imágenes de las visitas del santo a la ciudad y del propio acto que hoy se ha conmemorado.
La concesión de la medalla fue el último reconocimiento del concejo a su paisano, después de su nombramiento como hijo predilecto (1947), dedicación de una avenida (1971).