Decenas de personas vinculadas a la comunidad educativa se han concentrado en la Plaza Zaragoza para expresar su rechazo ante las políticas de la Consejería de Educación comandada por Felipe Faci y Olga Alastruey. Han convocado desde CGT esta movilización por el incumplimiento por la administración de sus propias instrucciones de la negociación de plantillas en las que se recogía el pacto alcanzado con los sindicatos en mesa sectorial y que determinaba que para el curso 23/24 las plantillas jurídicas de los centros se elaborarían con un horario lectivo para las docentes de 19 horas en secundaria y 24 en primaria, es decir, una hora de docencia directa menos.
En la negociación de plantillas es donde se estabilizan las plazas y la aplicación de este pacto, agrega CGT, supondría además de la creación de más plazas para estabilizar, la reducción horaria tan demandada por la comunidad educativa que derivaría en una mejor atención a las familias y a la parte pedagógica de la función docente. Las plantillas comenzaron a negociarse en las provincias de Zaragoza y Teruel y "a la vista de que el pacto no estaba siendo respetado, CGT decidió levantarse de la mesa en Huesca exigiendo el cumplimiento de las instrucciones de la administración donde se recogía el pacto".
Añade el sindicato que al principio "la administración pareció recapacitar" y anunció que convocaría una mesa técnica en cada provincia para revisar las plantillas siguiendo las instrucciones pero finalmente y una vez más, "la mentira se hizo evidente". La única convocatoria que han recibido los sindicatos ha sido a una mesa sectorial en Zaragoza, que es lo que correspondía si la negociación hubiese seguido sus cauces naturales.
Agrega CGT que "esta situación ha sido la gota que colma el vaso en un curso repleto de carencias a muchos niveles, ratios por las nubes, falta de docentes y personal no docente en los centros educativos (auxiliares de educación especial, conserjes, administrativas...), burocratización excesiva, falta de unanimidad de criterios desde inspección educativa, incumplimiento de la normativa de riesgos laborales, falta de espacios y materiales y un amplio etcétera".
Considera la Confederación que algunas de estas carencias "se verían aminoradas con el cumplimiento del acuerdo y por tanto con las docentes a 19 horas y 24 horas lectivas en el próximo curso. No olvidemos que esto es simplemente una reversión de los recortes de hace 10 años y que el partido socialista llevaba en su programa hace 8 años". “No se está pidiendo trabajar menos horas, sino trabajar del modo más eficiente para dotar de calidad a un sistema educativo que cada día se asemeja más a una empresa”, estima Loreto Ferrer, del sindicato CGT Huesca.
Otro de los motivos para la movilización es la llamada "integración del profesorado técnico de formación profesional (PTFP) al grupo A1 (el de mayor grado dentro del funcionariado). Que solamente integra al profesorado técnico de formación profesional funcionario de carrera que tenga estudios universitarios y no a todos ellos puesto que existen una serie de especialidades que al no tener correspondencia universitaria quedan fuera de la integración pero, sorprendentemente pueden sustituir a cualquier persona del grupo A1 llevando a cabo las mismas funciones y mismas responsabilidades cobrando como técnicos y no como A1, labor que estarían desempeñando. El agravio comparativo es evidente. Por todo ello CGT exige y defiende: el cuerpo único de docentes lo que conlleva mismo trabajo, mismas responsabilidades, mismas condiciones laborales y mismo salario".