Día de la Mujer y la Niña en la ciencia: "Los techos de cristal están ahí, no queda otra que seguir luchando"

Raquel Villacampa, Eva Tresaco, Pilar Gayán, Inmaculada Plaza, Abigail Jiménez y María Eugenia Rodríguez analizan la situación actual

10 de Febrero de 2023
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Eva Tresaco, Raquel Villacampa y Pilar Gayán. Día de la Mujer y la Niña en la ciencia. Foto Myriam Martínez
Eva Tresaco, Raquel Villacampa y Pilar Gayán. Día de la Mujer y la Niña en la ciencia. Foto Myriam Martínez

"Los techos de cristal están ahí, pero no queda otra que levantarnos cada día y seguir luchando". Ésta es la frase de una reputada científica aragonesa, que a pesar de su nivel y del notable reconocimiento a su labor, sigue percibiendo todavía esta realidad. Puede que no en todas las carreras, puede que no en todos los ámbitos, pero conforme se escarba un poco o se buscan referentes en los puestos más altos o más especializados de la ciencia, es muy difícil encontrar mujeres. Queda mucho margen de mejora para llegar a la igualdad en este campo, y el camino pasa por dar más visibilidad a las profesionales que han optado por él pasa por visibilizar y normalizar su labor. 

Con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se celebra el 11 de febrero tras la declaración de la Asamblea General de las Naciones Unidas en el año 2015, la Asociación de Mujeres Empresarias de la Provincia de Huesca (Amephu)/BPW Aragón, junto a Enredadas/ BPW Teruel y BPW Ceuta, todas ellas miembros de BPW Spain, han organizado una mesa redonda en Walqa, moderada por Raquel Villacampa Gutiérrez, y la participación de Eva Tresaco Vidaller y Pilar Gayán Sanz. Además, han intervenido online Inmaculada Plaza García, Abigail Jiménez Llorety María Eugenia Rodriguez López.

Con la conmemoración de esta efeméride, se pretende lograr el acceso pleno y equitativo de las mujeres y las niñas a la ciencia y su participación en ella. 

Raquel Villacampa Gutiérrez es matemática, miembro del Instituto Universitario de Matemáticas y Aplicaciones de la Universidad de Zaragoza (IUMA) y representante de la Iniciativa 11 de febrero en Huesca. Ha publicado más de 20 artículos de divulgación. Eva Tresaco Vidaller es matemática, profesora del Instituto Universitario de Matemáticas y aplicaciones de la Universidad de Zaragoza, así como investigadora principal de varios proyectos. Pilar Gayán, que atesora numerosos reconocimientos, como la Medalla de las Cortes, es química del Instituto de Carboquímica del CSIC. Inmaculada Plaza García es ingeniera electrónica de la Escuela Universitaria Politécnica de Teruel. Abigail Jiménez Lloret, por su parte, es física del I.E.S. Siete Colinas de Ceuta. Y por último, María Eugenia Rodriguez López trabaja en la Facultad de Educación, Economía y Tecnología de Ceuta.

Raquel Villacampa ha destacado la importancia de esta conmemoración que pone el foco en la necesidad de mostrar referentes a las niñas, "porque lo que no se ve es como que no existe", y ha comentado también que, además de los personajes históricos, es muy oportuno que puedan mirarse en mujeres actuales de su entorno.

Lo cierto es que todas las intervinientes han confesado que ninguna mujer les inspiró para estudiar sus respectivas carreras, debido a la práctica inexistencia de referentes, más bien fueron sus propios gustos personales y hasta un poco de azar y hasta suerte. En el caso de Inmaculada Plaza, a quien le encantaba la filosofía porque le gustaba entender el mundo, fue el profesor de esta materia quien le aseguró que los fílósofos del siglo XXI serían los físicos, y aquello le iluminó.

Panorámica del acto celebrado. Foto Myriam Martínez
Panorámica del acto celebrado. Foto Myriam Martínez

Inmaculada Plaza ha sido una auténtica pionera al ser la primera mujer en ocupar los principales puestos de representación de centros y asociaciones de Aragón, España e Iberoamérica. "Si soy la primera en todo, es una muestra clara de que estamos muy poquitas y de la poca representación que tenemos las mujeres", ha comentado.

Pilar Gayán ha reconocido que la carrera científica es muy exigente, pero ha defendido que sus renuncias personales no han sido mayores que las de cualquier otra mujer que trabaje en otro campo: menor tiempo para pasar con la familia, para el ocio o para descansar. Y, aunque no se ha sentido discriminada por su sexo a lo largo de su carrera, reconoce que pasó mucho tiempo hasta que nombraron por primera vez a una mujer para dirigir el CSIC y no es muy común verles ocupar los puestos de profesora de investigación o de rectora en la Universidad. "Los techos de cristal están ahí, pero no queda otra que levantarnos cada día y seguir luchando", ha proclamado.

Eva Tresaco tampoco se encuentra con muchas mujeres en los congresos de investigación y aprecia que, conforme avanza el tiempo y se van formando las familias, la mujer ya no lleva la misma velocidad de crucero que sus compañeros hombres. "Con la misma edad te cuesta más llegar a cargos y hay que hacer ciertos sacrificios para llegar a todo", ha declarado.

Por lo general, todas han coincidido en lo poco que les gustan las cuotas, porque preferirían que les llamaran por sus méritos o por lo que pueden aportar, pero Gayán ha señalado que al menos son una manera de mejorar la infra representación de las mujeres. "Se están incentivando medidas para llegar a la igualdad y ojalá un día no hagan falta porque la representación sea paritaria", ha añadido.

Inmaculada Plaza ha coincidido en la idea. "Es cierto que si no se imponen las cuotas, se olvidan de que estamos las mujeres", ha dicho, y ha agregado que, en su caso, en ocasiones sí ha sentido cierto rechazo machista. Después, ha explicado las diferentes actividades que se llevan a cabo en Teruel para divulgar la labor y presencia de la mujer científica, como visitas a colegios e institutos, talleres, conferencias, colaboración con otros organismos como el Instituto de la Juventud y la complicidad que han encontrado en los medios de comunicación, que han realizado una labor "impresionante" para darles difusión. "Lo importante es visibilizar y normalizar", ha considerado, y ha destacado también el papel "determinante" de los padres y madres a la hora de influir en las carreras que van a estudiar sus hijas e hijos.

Raquel Villacampa ha manifestado que Huesca también tiene "esa suerte" con los medios de comunicación, y ha deseado que tanto el profesorado, como el entorno y las familias trabajen en la misma dirección para que "se puedan recoger los frutos de lo que aquí estamos sembrado, de aquí a unos años".

Por último, se ha pedido que el profesorado y las familias "empoderen" a las niñas cuando, a esas edades complicadas de entre los 11 y 13 años, deben elegir los estudios que quieren realizar más adelante, que se les transmita la idea de que son igualmente capaces que sus compañeros masculinos de realizar cualquier trabajo en el futuro. 

Antonio Gallego y Carmen Fernández. Foto Myriam Martínez
Antonio Gallego y Carmen Fernández. Foto Myriam Martínez

LA LIBERTAD DE APRENDER

En el acto, que ha contado con la colaboración del Instituto Aragonés de la Mujer, ha recogido a través de vídeos los testimonios de Marta Liesa Orús, vicerrectora del Campus de Huesca de la Universidad de Zaragoza, y Margarita Sánchez Romeo, vicerrectora de Igualdad, Inclusión y Sostenibilidad de la Universidad de Granada, y no lo ha podido hacer, por problemas técnicos, José Martín-Albo Lucas, vicerrector del Campus de Teruel de la Universidad de Zaragoza.  

Marta Liesa ha sostenido que la brecha de género es una realidad que, igual que se refleja en diversos sectores del país, existe también en la educación preuniversitaria y universitaria. Según ha indicado, hay carreras con mucha mayor presencia de varones, como la Ingeniería Agronómica, Ciencias del Deporte y Medicina, y otras mucho más feminizadas como Magisterio, Enfermería o Nutrición. "En 1902 sólo había un 2 % de mujeres licenciadas, que fueron las primeras en romper el techo de cristal y nos regalaron algo precioso, la libertad de aprender", ha indicado.

La clausura ha corrido a cargo de María Goikoetxea, directora del Instituto Aragonés de la Mujer, que sí ha estado presente en el acto celebrado en Huesca, al igual que la directora provincial, Elena Pérez Ramón, la presidenta de Amephu, Carmen Fernández, el teniente de alcalde José María Romance, y varios ediles de la Coporación municipal, como Rosa Gerbás, Nuria Grau, Óscar Sipán y Guillermo Boix. Como anfitrión del Parque Tecnológico Walqa ha actuado Antonio Gallego.

 

María Goikoetxea, directora del IAM. Foto Myriam Martínez
María Goikoetxea, directora del IAM. Foto Myriam Martínez

ha sosenido que las mujeres todavía están asociadas a labores de cuidadoras y cuando se salen de esos estereotipos la situación parece excepcional. Por eso, las instituciones públicas deben trabajar con el fin de dar visibilidad a los referentes y allanar un poco el camino hacia la igualdad real.

"No hay que olvidar el papel de la ciudadania en su conjunto y el papel de los hombres. Tampoco debería existir el IAM y eso sería que existe igualdad plena", ha dicho, para proponer después que creemos entre todos espacios atractivos para que el hombre se impliquen en la lucha de la igualdad. "Porque sólo se alcanzará si trabajamos juntos. Seguid trabajando desde las administraciones y las asociaciones para acabar con todos los ambitos de violencia, tambienn en el campo de la ciencia", ha concluido.

 


 

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