Manos Unidas abre su Rastrillo solidario con un proyecto para llevar agua potable a escuelas de Angola

Rosa Tenas entrega los premios Empresa Amiga a Carnicería Miguel Escuer y Floristería Usón, en una apertura inaugurada por el obispo de Huesca

Mercedes Manterola y Myriam Martínez
06 de Diciembre de 2025
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El Rastrillo Solidario de Manos Unidas abre sus puertas en Huesca

Manos Unidas ha inaugurado este sábado en Huesca su tradicional Rastrillo solidario, un punto de encuentro que, desde hace más de tres décadas, moviliza a voluntarios, colaboradores y vecinos con el objetivo compartido de recaudar fondos para proyectos que mejoren la vida de personas con grandes necesiades.

Este año, la recaudación irá destinada a un proyecto en Angola, concretamente en la provincia de Moxico, donde Manos Unidas apoyará la construcción de tres pozos de agua potable en otras tantas escuelas. Una infraestructura esencial que permitirá abastecer a alumnos, familias y vecinos, mejorar la salubridad y reducir drásticamente enfermedades vinculadas al consumo de agua contaminada. La iniciativa, con un presupuesto de 35.805 euros, beneficiará directamente a 6.160 personas.

Un vídeo explicativo de este proyecto ha abierto el acto de la inauguración oficial, presidida por el obispo de Huesca, Pedro Aguado, que ha acompañado a la delegada de Manos Unidas en Huesca, Rosa Tenas, y otros miembros de la entidad y voluntarias. También ha participado Iván Rodríguez, teniente de alcalde del Concejo oscense, entre otros ediles, y el párroco de la iglesia de Santiago, Luis Gurucharri. 

El obispo ha agradecido la dedicación del voluntariado apoyándose en unas palabras del Evangelio. “Jesús está hablando de la gente que ayuda a los demás. Es decir, está hablando de vosotros. Y dice: yo os aseguro que quien ayude a estos pequeños, aunque solo sea dándoles un vaso de agua, no quedará sin recompensa”. Con esta referencia ha querido subrayar que el compromiso de las voluntarias y voluntarios “es una catarata de agua”.

Rastrillo de Manos Unidas. Foto Myriam Martínez
El obispo de Huesca, Pedro Aguado, dirigiéndose a los asistentes. Foto Myriam Martínez

Aguado ha recordado también el impacto transformador del proyecto. “Sé lo que significa el agua en esos países. Sé lo que significa que las mujeres salgen al atardecer con garrafones enormes o con cubos de agua en la cabeza, recorran horas de camino y vuelvan de noche con el agua para el día siguiente. Y así todos los días de su vida. Y sé lo que significa cambiar esa realidad, que en su pueblo tengan un pozo de agua y que puedan vivir de otra manera y que puedan tener otro tipo de posibilidades. Por eso ese proyecto, como tantos que hace Manos Unidas, es absolutamente necesario, transforma la vida de la gente. Lo que hagamos con este rastrillo va a cambiar la vida de tantísimas personas, especialmente de las mujeres que se encargan esa tarea. Es bueno que lo sepamos y que lo comprendamos", ha apuntado.

Finalmente, ha querido agradecer a Manos Unidas y a todos los voluntarios el trabajo realizado. "Esto se llama amor. Gracias por hacerlo y gracias por dedicaros con tanto entusiasmo a esta tarea tan apasionante. Esto es construir el reino de Dios y su justicia, que ya sabéis que necesita instrumentos. Sois instrumento del reino de Dios", les ha trasladado.

MÁS DE TREINTA AÑOS DE HISTORIA

La delegada de Manos Unidas en Huesca, Rosa Tenas, ha recordado la larga trayectoria del rastrillo, que puso en marcha la primera presidenta hace más de 30 años. “Lo que Manos Unidas intenta con esta iniciativa es paliar en todo lo que se pueda las necesidades, en este caso básicas, como puede ser el agua, la comida, la sanidad”, ha explicado

Tenas ha destacado el impacto directo del proyecto en Angola, donde la mortalidad de los niños es altísima por ese agua contaminada. "Si se realizan esos pozos, esa mortalidad esperamos que dé un bajón grande, al conseguir salubridad”. También ha dedicado palabras de reconocimiento al equipo del taller de Manos Unidas, "maravillosas costureras, artesanas, que cada día buscan hacer cosas nuevas que puedan interesar a los demás”.

Rastrillo de Manos Unidas. Foto Myriam Martínez
Miguel Escuer y Rosa Tenas. Foto Myriam Martínez

Asimismo, ha agradecido la colaboración constante de numerosas empresas locales. En el acto se han entregado los reconocimientos de “Empresa Amiga”, que este año han recaído en Carnicería Miguel Escuer y Floristería Usón. “Es pequeño, pero te lo damos con todo el cariño”, le ha dicho al recoger su diploma. “La recompensa os puedo garantizar que la recibimos día a día. Y muchísimas gracias por vuestra labor", ha respondido Escuer.

Rastrillo de Manos Unidas. Foto Myriam Martínez
Floristería Usón también ha tenido un reconocimiento. Foto Myriam Martínez

El teniente de alcalde Iván Rodríguez ha subrayado la importancia de este tipo de acciones. “La solidaridad siempre es muy importante, pero cuando va dirigida a cubrir unas necesidades tan básicas como la falta de agua, lo es mucho más”, ha afirmado. Ha animado a la ciudadanía a participar en el rastrillo y a contribuir “a conseguir el objetivo de lograr el presupuesto para cumplir con el proyecto”.

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Como cada año, el sorteo solidario también será una pieza clave de la recaudación. Tenas ha recordado que los boletos ya están a la venta y ha detallado que los premios son un menú degustación del restaurante Lilas Pastia, un jamón de Supermercados Alto Aragón y una artesanía del taller de Manos Unidas. "Gracias a todos los que nos donan para poder hacer este sorteo", ha señalado Tenas, quien ha cerrado con un reconocimiento al párroco de Santiago. "Sin ti, Luis, esto no sería posible", le ha trasladado.

Antes de la bendición final, el obispo ha tenido un recuerdo especial para Ninfa y José, “quienes dieron mucho amor” y forman parte de la memoria afectiva de la organización.

El Rastrillo solidario de Manos Unidas permanecerá abierto hasta el 13 de diciembre, en horario de 17.00 a 21,00 horas, en los locales de la parroquia de Santiago Apóstol. Mesas repletas de artesanía, costura, regalos, decoración y detalles navideños aguardan a los visitantes, que cada año convierten esta cita en un motor de esperanza para miles de personas.

 

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