Sustituir complejos y renuncias por pasión, esfuerzo e ilusiones para abatir las barreras de la desigualdad ha sido la receta, junto a otras como cultivar el conocimiento a través de la formación, de cuatro mujeres referentes en el mundo turístico que han protagonizado el cierre del Máster Universitario en Dirección y Planificación del Turismo que promueven Universidad de Zaragoza y Gobierno de Aragón.
‘La dirección en el sector del turismo: la experiencia de mujeres directivas en la provincia de Huesca’ es el título de la mesa redonda que ha tenido lugar, en el Campus de Huesca de Unizar. El salón de actos de la Facultad de Empresa ha contado con la presencia de Inés Dewulf, Ana Blasco, Ana Gállego y Ana Puy..
La profesora del Departamento de Contabilidad y Finanzas del campus de la Universidad de Zaragoza, Ana Monclús, ha desgranado los resultados del estudio Liderazgo femenino en el sector turístico en España, que revela la baja representatividad, que se percibe como una barrera de acceso la conciliación familiar, que hay una igualdad en funciones que no se corresponde con una retribución igualitaria, que los directivos no consideran que se haya producido una efectividad en las políticas implementadas para que los techos de cristal se rompieran, y que más del 60 % estimaban que seguiría habiendo un sesgo de género en diez años.
Algo que preocupa a la Cátedra de Desarrollo Directivo Femenino, cuyo estudio autonómico afirma que el 73 % de las directivas creen más difícil acceder a un consejo de dirección y que en una mayoría se les exige más. Y, además de la barrera que se percibe en la conciliación, lo es también "carecer de referentes femeninos".
La profesora Isabel Brusca ha dirigido la mesa redonda tras explicar la actividad de la Cátedra que ella dirige.Ha afirmado que "las directivas todavía tienen barreras y dificultades" y todavía hay "un 80 % de empresas que tienen menos de un 50 % de directivas", con muy pocas en el área de tecnología.
Inés Dewulf, de UR Pirineos de Murillo de Gállego, ha explicado su evolución desde su Francia natal hasta Huesca, con una prolija formación hasta llegar a su actual destino profesional y la presidencia de la asociación de Turismo Activo de Aragón, entre otros cargos representativos que ostenta. "Yo pienso que no somos hombres ni mujeres, somos personas. Con trabajo, esfuerzo y empatía, como digo a mis tres hijos todos los días, se puede llegar muy lejos, pero nada está regalado, para un hombre ni para una mujer". También ha agregado como factores imprescindibles la ilusión y la pasión. "Soy muy luchadora, a nadie hay que cortar las alas y todos tenemos que volar hacia nuestros sueños".
Asume que es "una referente, una líder en un sector masculino, pero con trabajo y esfuerzo se puede llegar muy lejos. No perdáis nunca vuestras ilusiones y retos". Ha concluido que el sector le ha permitido la conciliación personal y familiar para ir evolucionando hacia la mejora continua dentro de su profesión y de su vida.
Ana Blasco, propietaria de Casa Pardina de Alquézar, comprometida con su pueblo y con su territorio, ha recordado sus orígenes en El Mesón del Vero hace más de treinta años, las advertencias de sus padres cuando hicieron el cambio hacia el destino actual y su actual ejecutoria que ha combinado con su presencia asociativa en los Empresarios de Sierra de Guara y en Amephu además de la alcaldía de su pueblo. "Mi hermana y yo hemos estado toda la vida endeudadas. Si tienes que invertir, tienes que lanzarte, creer en el sistema. A mucha gente le da miedo, pero si te marcas unos objetivos llegas".
Ha reconocido que la hostelería es dura "pero eso es algo innato y lo tienes que saber. Cuando la gente tiene fiesta, tú trabajas, pero cuando la gente trabaja tú tienes un montón de tiempo libre para hacer un montón de cosas". "Yo soy inquieta", y de ahí su espíritu de participación.
Ana Gállego, directora de Marketing de Enate, ha explicado sus treinta años en la empresa, pionera en la utilización del término Enoturismo. En las tres bodegas del grupo, varios profesionales hacen vivir la experiencia del vino y el entorno. "Enseñamos y mostramos lo que queremos enseñar. Somos los guardianes de la marca, de lo que la familia quiere demostrar y enseñar al resto de las personas sus valores". "En ningún momento dado, me he sentido desplazada por ser mujer. Me he movido en un mundo de hombres, pero la propia empresa ha ido evolucionando y hemos pasado de ser una cúpula directiva con únicamente hombres y ahora somos tres mujeres y tres hombres, pero no se ha buscado que hubiera paridad, sino que la persona ha estado cualificada y preparada".
Ha abundado en que vende "felicidad embotellada" y ha recomendado que "os enganchéis y seais como una lapa a lo que en el día de mañana queráis hacer. Os vais a mover como un conjunto, una masa y vais a crear un añadido y esa experiencia". "Yo coy un claro ejemplo de que, desde la base, he llegado a la dirección".
Ana Puy, del Hotel Mediodía de Plan que además instaló una lavandería industrial en Boltaña, ha afirmado que las "decisiones correctas se consiguen cuando hay un análisis y una formación que te ampara". "Como mujer, no ha sido más complejo emprender que un hombre. Sólo porque dejas a los niños y al marido de lado, y es un sobreesfuerzo, del que en Aragón se preocupa la mujer". Hay que tener conocimiento, ha añadido, hay que "rodearse de gente inteligente, que sepa, que te dé buenos consejos, hay que tener templanza, hay que saber aguantar los embates de la empresa, y hay que dormir tranquilos. Hay que tener la conciencia de que crees en ello y saldrás adelante. Hay que tener rigor, trabajar y estudiar hacia la expelencia".
La responsable del establecimiento sobrarbense ha agregado que "hay que saber a veces perder para luego ganar. La empresa es negociación, no podemos tirar de la cuerda y romperla. A veces hay que ceder para poder ganar. En definitiva, la formación, las ganas y el esfuerzo. hay que levantarse cada día con las ganas de comerse el mundo, tener la ilusión de sacar todo adelante y luchar".