El sector de deportes de aventura agradece a la CHE que tenga en cuenta los usos turísticos en la gestión de caudales

Ha valorado la búsqueda de consenso de la confederación para garantizar en la medida de lo posible la actividad turística

DH
05 de Mayo de 2023
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El sector de deportes de aventura agradece a la CHE su gestión.
El sector de deportes de aventura agradece a la CHE su gestión.

Las diferentes asociaciones de turismo de la Cuenca del Ebro han manifestado su agradecimiento a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) por tener en cuenta los usos turísticos en la gestión de los caudales en momentos de especial crisis climática que llevan a una situación de sequía y escasez.

Las asociacionesTDAragón, Asociación del Noguera Pallaresa y otras de Cataluña, Cantabria Activa, Aktiba, Atacyl de Castilla y León, y Asociación Navarra de Empresas de Actividades Turísticas exponen que las restricciones y reajustes que provoca la falta de agua pueden imposibilitar el desarrollo económico generado alrededor de las actividades de aventura, especialmente en torno a los ríos de aguas bravas y sus embalses, como río Gállego, Ésera, Noguera Pallaresa, Noguera Ribagorzana, embalses del Mediano, Grado, Linsoles, Mequinenza, río Ebro y Alto Ebro.

En la actual situación de sequía, la gestión del agua “es un asunto crucial” que afecta a muchos sectores. “Por ello, es importante destacar la labor de la Confederación Hidrográfica del Ebro en la mediación y establecimiento de puentes entre los diferentes actores, sindicatos de riego, hidroeléctricas, usos industriales, etcétera. Su alta capacidad de gestión -apuntan las entidades- ha permitido un diálogo y la búsqueda de un máximo consenso para garantizar en la medida de lo posible –aunque con altas restricciones debidas a la gravedad de la sequía– la actividad turística y posibilitar así la continuidad de este tipo de actividades de turismo de aventura y su mínima sostenibilidad”.

Recuerdan en este sentido que el aprovechamiento turístico no consumidor de agua de los ríos y embalses de toda la cuenca ha creado una fuerte actividad económica basada en los aprovechamientos hídricos.

“Esto permite el disfrute de por lo menos unas 825.000 actividades en sus ríos, con un valor económico directo de más de casi 29 millones de euros en la Cuenca del Ebro, sin incluir el turismo generado en pantanos, como canoa, pesca, kite-surf, actividades acuáticas…. Este tipo de actividades se desarrollan fundamentalmente en áreas rurales, posibilitando nuevos yacimientos de empleo y contribuyendo a la dinamización económica de estas zonas”, agrega.

 

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