La alberca de Cortés se encuentra vacía y con decenas de peces muertos tras el desembalse realizado debido a que la sequía que ha dejado el pantano de Arguis con el caudal ecológico.
No es la primera vez que se produce esta situación. Hace unos dos años murieron muchas carpas en esta lámina de agua al vaciarse. Aunque se llegaron a producir protestas por esta situación, con la nueva normativa del Gobierno autonómico sobre especies alóctonas, no constituye ninguna falta ni delito ambiental, debido a que las especies que acoge la alberca no son originarias de la zona, como la carpa o el cangrejo rojo.
Quienes han pasado por este espacio natural han quedado sobrecogidos por las imágenes de una alberca completamente ausente de agua, con tan sólo un "charco" en el centro del humedal que aun aprovechaban para descansar una colonia de cigüeñas. En la presa de la Alberca, en la salida del agua, los restos de carpas, víctimas de esta situación de sequía extrema.
La situación del pantano de Arguis es muy precaria debido a la falta de lluvias y el fuerte calor de las últimas semanas, por lo que se ha decidido no desembalsar más y mantener el caudal ecológico. De esta forma, se ha recurrido para el riego a este único recurso de agua en la alberca de Cortés.
Las albercas de Cortés y Loreto pertenecen al Sindicato de Regantes del Pantano de Arguis, constituido en 1919 y que se rige por sus propias ordenanzas aprobadas ese año. Aunque los regantes son propietarios de las aguas, deben someterse a lo establecido en las ordenanzas.