Un temporal con rachas de viento que alcanzaron este martes en Huesca los 70 kilómetros por hora, en los momentos de máxima intensidad, ha tronchado algunos árboles y provocado la caída de numerosas ramas en distintos puntos de la ciudad, pero no se tiene constancia, de momento, de un mayor alcance de los daños ocasionados. Se trata de una inclemencia meteorológica "excepcional", según fuentes municipales, que apenas duró unos minutos, en torno a las 23:00.
Las Brigadas de Jardines del Ayuntamiento de Huesca han destinado sus recursos durante toda la mañana para retirar los restos de la tormenta seca y es previsible que continúen este jueves desarrollando la misma labor. Se les ha visto trabajar en el Parque Miguel Servet y también se han visto afectadas zonas como el Pasaje Almériz, el Pasaje Burgos, las calles Fraga, Ana Abarca de Bolea y Teruel, según se ha confirmado hasta el momento.
La técnico de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Huesca, Ana Pérez Adell, ha explicado que, dentro de la escala de Beaufort de clasificación de la fuerza de los vientos, del 0 al 12 se alcanzó un nivel 8 denominado "temporal", caracterizado "por sus efectos en tierra que supone el quebranto de las copas de los árboles, así como la circulación dificultosa para las personas".
Por ello, ha puntualizado que los desperfectos originados no se deben al estado del arbolado, sino "a una inclemencia meteorológica excepcional".
Durante los próximos días, ha añadido, se va a revisar el estado de las copas de los árboles por si se ha quedado alguna rama colgada en altura. "Vamos a observar datos muy interesantes a la hora de analizar la composición del bosque urbano oscense, porque hemos detectado que hay especies que son especialmente vulnerables cuando suceden estos episodios", ha señalado, y al mismo tiempo, se han observado puntos de fractura en determinados ejemplares. Toda esta información será importante a la hora de gestionar el bosque urbano de la capital altoaragonesa, que cuenta con un patrimonio de 18.000 árboles.