Mari Mar Blanco: "Podemos ver a Otegi de lendakari apoyado por el PSOE"

La hermana de Miguel Ángel Blanco, 25 años después, se hace una terrible pregunta: "Si la muerte de mi hermano ha servido para algo"

13 de Noviembre de 2022
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Mari Mar Blanco en la Rosaleda del Parque de Huesca dedicada a su hermano Miguel Ángel
Mari Mar Blanco en la Rosaleda del Parque de Huesca dedicada a su hermano Miguel Ángel

No es una entrevista. Es una conversación. Preguntas e interpelaciones se suceden. La voz de quien ha conocido tantas víctimas del terrorismo y la más legitimada de quien ha visto fallecer a su hermano en una de las más crueles ejecuciones que se le hubieran ocurrido al más abyecto de los criminales de la historia de la humanidad. Es, como se dice, a calzón quitado, procurando sustituir la política por la ética, el olvido por el recuerdo. Quedan apenas dos horas para inaugurar la exposición "La voz de las manos blancas" en la sala exterior del Centro Cultural Manuel Benito Moliner (al entender de este escribano, impropia escena para la profundidad de la causa). La muestra fotografía un espíritu, el de Ermua, si es que es una posibilidad metafísica: retratar un espíritu. Y, sin embargo, lo es. "Quiere hacer llegar lo que hemos vivido, sufrido y padecido. Que sean muchos los jóvenes que se acerquen a visitarla para que les sirva de recuerdo, y para aquellos que lo vivieron pero las circunstancias de la vida les han llevado a pasar página o a medio olvidar lo que hemos padecido en este país a lo largo de 60 años".

No es sólo denuncia y remembranza de los atentados terroristas del País Vasco, sino que recuerda los delitos etarras en Aragón, "también tan castigada por el terrorismo, donde han sido asesinados políticos, militares, representantes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y queremos que sirva de homenaje no sólo para las víctimas sino para muchos amenazados y perseguidos. En fotografías, se ve cómo a pesar de la persecución totalitaria y fascista que se vivía en aquel momento fueron muchos los valientes que decidieron dar la cara y seguir alzando la voz por defender la libertad, la convivencia y sobre todo mayores espacios de seguridad, muy especialmente en mi tierra, en el País Vasco. Se trata de recordar para no olvidar el pasado para que en el futuro no vuelva a suceder".

Primera interpelación incruenta: ¿por qué se llama a ETA fascista si en su asamblea del verano se autodefinió como marxista-leninista? "El término de fascista siempre ha sido utilizado, no sólo en esta época. Siempre recuerdo que a la organización terrorista ETA se le ha definido como totalitaria, fascista. Tienes razón. Posiblemente al final te quedas con la terminología de lo habitual, pero, independientemente, podemos obviar esto y decir que son asesinos, totalitarios, que pretendían imponer a golpe de asesinatos sus ideas totalitarias, en las que no respetaban para nada la libertad. Ellos querían acabar con la vida de tantos y tantos inocentes que pensaban de manera diferente a ellos. Eso es lo que siempre han hecho, perseguir a quien pensaba de manera diferente, y también es importante no sólo rendir homenaje y recordar a las víctimas del terrorismo a las que arrebataron su vida y también a los que fueron perseguidos y, en un momento dado en una situación tan complicada en la que simplemente por alzar la voz pasabas a formar parte de la lista negra, de un objetivo de la organización terrorista ETA. Hubo muchos periodistas perseguidos pero, a pesar de la amenaza siguieron anunciando esa situación que se vivía en el País Vasco y Navarra. Muchísimos profesores en las universidades que dieron la cara, y no era fácil denunciar la situación de acoso y amenaza en la universidad. Los etarras querían estar en todos los lados porque pretendían imponer con asesinato, persecución, la educación en la que siguen intentando influir. Querían estar en todos los ámbitos de la sociedad para imponer sus ideas totalitarias y también el miedo, la amenaza. Ellos se hacían más fuertes ante la imposición del miedo, que era muy libre y respetable, pero había un marco de silencio. Ahora también estamos viendo un momento en que se intenta silenciar. La diferencia clara es que ahora vivimos es un silencio impuesto por un gobierno central que, mientras no hablemos de víctimas y las víctimas no hablen y recuerden, se cree legitimado más para seguir negociando con Bildu, que son los herederos de HB, que siguen siendo los mismos, defendiendo lo mismo que defendía HB. Siguen sin condenar y siguen legitimando el terror. A día de hoy, todavía seguimos diciendo que ahora no matan, pero que hubo un momento que estuvo bien matar. Sigue siendo Bildu. Mientras las víctimas no hablemos, no recordamos a la sociedad que somos víctimas del terrorismo".

En el actual estado de cosas, con Bildu en las instituciones, ¿en qué medida es precisa la afirmación de la derrota de ETA en términos prácticos? "Yo proclamo que ETA ha sido derrotada policialmente, porque la victoria se la quiero dar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y, por supuesto, también al sacrificio de tantas y tantas victimas inocentes, porque la victoria siempre tiene que ser de los buenos. Pero nos queda la más importante, que es la derrota política de ETA, porque Bildu sigue defendiendo lo mismo, sigue utilizando el mismo lenguaje que cuando ETA mataba y persiguiendo los mismos objetivos. Nos queda la derrota de ese proyecto político por el que nace ETA".

Mari Mar Blanco.
Mari Mar Blanco.

Incide en este concepto para precisar la atmósfera política y también la del País Vasco. "Políticamente no son derrotados, pero no ya solo por que estén sentados en el Congreso y defendiendo los mismos objetivos que cuando ETA mataba. El problema es que tenemos un partido, llámese Bildu o HB, que en estos momentos está siendo legitimado para negociar con el gobierno de España en asuntos que nos afectan directamente a todos y cada uno de los españoles, y el problema es que tenemos un gobierno que le legitima desde el punto de vista ético, moral y político mucho más a un partido que apoyaba cada uno de los asesinatos que a un partido como el PP que ha sufrido en sus propias filas el asesinato y la persecución de muchos de sus cargos públicos. El problema es que tenemos a un gobierno que se sienta y se pone de rodillas ante las exigencias de un partido como Bildu. Todos tenemos en mente aquella frase de Otegui de presos a cambio de presupuestos o presupuestos a cambio de presos. Oiga, Sánchez no cumple con España, pero con los herederos de ETA cumple a la perfección. Porque en estos momentos no sé si queda algún preso de ETA y si quedan son muy poquitos los que no están cerca de las cárceles del País Vasco. Cada viernes, cumple con esos cinco acercamientos a las cárceles. Ese es el verdadero problema".

En una distopía, ¿qué hubiera sucedido si los terroristas y sus adláteres (los de "El árbol y las nueces" de San Sebastián y Gurruchaga) hubieran tenido en el horizonte la perspectiva de lo actual? "Considero que ETA y HB hace 40 años se sentían muy cómodos asesinando. Ellos supuestamente nacen para luchar contra el franquismo, una teoría que se desmonta si tenemos en cuenta que más del 90 % de los asesinatos de ETA son cometidos en democracia. Y cuando ellos refuerzan su campaña de asesinatos es cuando entramos en democracia. A partir del año 78, durante los años 80, es cuando ellos refuerzan el asesinato y el tiro en la nuca, con lo que yo, sinceramente, tengo que decir que ellos siempre han hecho lo que querían hacer. En sus manos estaba haberlo dejado. Estoy convencida de que mataban porque se sentían muy a gusto, y no hay más que escuchar a los etarras que cumplen condena y sienten orgullo de los asesinatos. Porque a Bildu le cuesta tanto y no quieren condenar el pasado, el terrorismo. En el fondo, hace 40 años hacían lo que querían hacer".

¿Son las calles del País Vasco ya una arcadia de seguridad y serenidad para quienes pasean por ellas sin complejos de exhibir símbolos españoles? ¿O para las propias víctimas? "Hay una frase de una concejal del PP en el Ayuntamiento de San Sebastián que en la tregua del año 2000, en una entrevista, dijo: ahora no nos matan pero no nos dejan vivir en paz. Es lo que desgraciadamente está ocurriendo con la normalidad con la que algunas veces los nacionalistas y el PSOE intentan vender lo que se vive en el País Vasco. Miento si digo que no se vive muchísimo mejor ahora que cuando ETA mataba. No se puede negar la realidad y la evidencia. Pero yo no sé si me iría a tomar un café al Goierri, porque quiero pensar que mi vida no correría peligro, pero mi dignidad y mi integridad física sí. Cabe recordar que, no hace mucho, el hijo del presidente del PP en el País Vasco ha sido insultado y amenazado jugando a fútbol. Y cómo los jóvenes universitarios pertenecientes a Nuevas Generaciones del PP son insultados e incluso agredidos físicamente en Vitoria. Todavía hay un acoso y una persecución a través del insulto y de la amenaza porque ellos siguen siendo lo que eran. No matan pero no nos dejan vivir en paz. Siguen intentando imponer su proyecto totalitario y lo que pretenden es que la convivencia en el País Vasco sea la que ellos quieren imponer, que lógicamente es contraria a la que los demócratas defendemos y por la que muchos han dado su vida".

La deriva política de la actualidad, las alianzas insospechadas otrora imposibles, le inquietan especialmente a Mari Mar Blanco. "Yo no descarto algo que, cuando me lo contaban hace unos años, decía que es imposible: Otegi lendakari. Tal y como estamos viendo las cosas, podemos ver a Otegi de lendakari apoyado por el PSOE, porque ya sabemos que las relaciones entre PSOE y Bildu son de dejarse querer y no descarto que eso sea una realidad. Y, efectivamente, el problema es por qué los jóvenes cada vez ponen sus ojos en un partido como Bildu. Ahí posiblemente pueda tener mucha culpa la educación, pero también hay que considerar qué están viendo nuestros jóvenes, no sólo en País Vasco y Navarra, cuando se permite que de repente llegue un asesino que ha salido de la cárcel, un terrorista y sea homenajeado con todos los honores en las calles del País Vasco y Navarra. Podemos ver gente joven, abuelos, por supuesto, adolescentes y muchos niños, que lo primero que pueden pensar es que tan malo no sería este vecino o familiar si lo recibimos con honores. Y me pregunto qué pueden pensar muchos jóvenes no sólo en nuestra tierra, sino en toda España, porque no han vivido, porque no conocen de manera directa, no porque les haya tocado, porque muchos no nos ha tocado pero lo hemos visto en los medios. Nos acordamos en los años 80 en que no había noticiero que no empezara con un atentado terrorista. Y ves a un gobierno que negocia sin pudor y sin problema y cede ante los herederos de Batasuna y ETA. El mensaje que estamos dando es que probablemente no lo hicieran tan mal cuando se les trata tan bien. Ese es el problema de los mensajes encubiertos que trasladamos, no sólo con los homenajes en País Vasco y Navarra, sino también con el trato del gobierno de España a un partido como Bildu, que ni condena ni reconoce a las víctimas. De poco me vale que me diga que es víctima del conflicto, porque mi hermano era inocente y no era víctima del conflicto, como cada uno de los niños que murieron en los atentados de la casa cuartel de Zaragoza, ni cada uno de los guardias civiles, policías o periodistas. No eran parte de conflictos ni chorradas varias. Eran ciudadanos libres que querían utilizar su libertad en beneficio de todos, y por eso se les arrebató su vida. Quiero que se les reconozca como víctimas inocentes del terrorismo, y ellos se niegan. No van a reconocer a mi hermano ni a compañeros de tu padre como víctimas del terrorismo. Son víctimas de conflicto, dicen. Y el problema es que el PSOE les ha comprado ese discurso. ¿Por qué? Porque estamos en una estrategia de blanqueamiento de todo el pasado, de borrar la culpa de todos los asesinos, acallar y silenciar a las víctimas para ellos seguir manteniéndose en el poder. Ese es el mensaje que puede estar calando en los jóvenes. Y eso me fastidia. Estamos cayendo en un una dinámica peligrosa".

Recuerda la presidenta de la Fundación Miguel Ángel Blanco que no conviene perder la perspectiva ni los terribles daños psicológicos a tantos familiarers de asesinados. "Prácticamente estamos hablando de antes de ayer. Hasta bien entrados los 90 se seguía culpando a las víctimas. Cuando voy a Extremadura o Andalucía, me dicen viudas que no han vuelto al País Vasco ni piensan volver, porque les han tratado como culpables. "Me echaron y me decían que cuanto antes mejor", me dicen. Y esto ha ocurrido hasta entrados los años 90. El problema es que lo que despertó la movilización con el secuestro de mi hermano fue: joven de 29 años, pena de muerte anunciada. Todos lo vieron así, y por primera vez los españoles se dieron cuenta de que las víctimas eran siempre ciudadanos inocentes, porque en mi hermano vieron la inocencia pura de la víctima del terrorismo. Un concejal de un pueblo que no conocía nadie, nadie podía justificar aquel asesinato, ni siquiera por ser concejal del PP, que en algún momento también se decía: era concejal del PP o del PSOE, como sucedía antes con los guardias civiles y policías. Como era guardia civil... Ya con Gregorio Ordóñez, la gente empezó a despertar y ya vieron que la víctima no era culpable, que era inocente. Como con Ortega Lara. Aquello era injusto, pero con mi hermano fue la explosión de la inocencia pura de las víctimas del terrorismo". Rescatamos del olvido aquella racha en la que ETA asesinaba a ciudadanos a los que achacaba tráfico de drogas, y se atribuía la condición de justiciera. Mafia pura. "Lo curioso es que se demostró luego que ellos se financiaban con las drogas".

NI PERDONO NI OLVIDO

Parafrasea, ante la pregunta, a Enrique Múgica Herzog, cuyo hermano fue asesinado. Otra víctima. "Yo ni perdono ni olvido. Me mantengo en ello. Ni quiero ir a la cárcel a hablar con Txapote ni a tomarme un café con el hijo de no sé quien. Quiero que me dejen vivir en paz y me permitan defender la memoria, la dignidad y la justicia de mi hermano y todas las víctimas. No quiero nada, sólo que caiga todo el peso de la ley y cumplan hasta el último día. Y más ahora con la transferencia de prisiones al Gobierno Vasco. Txapote ha sido acercado al País Vasco como otros tantos presos terroristas con delitos de sangre que no muestran ni arrepentimiento, ni colaboración con la justicia ni absolutamente nada. Está claro que, como dijo Otegi, presupuestos a cambio de presos, pues todos a las cárceles del País Vasco. Todos sabemos lo que va a pasar con la competencia de prisiones en el País Vasco. Sucederá como con Cataluña, que van a entrar y van a salir por la puerta de atrás. Con la concesión de terceros grados a etarras hemos tenido la suerte de que el fiscal de la Audiencia Nacional ha parado a cinco y los ha devuelto a la cárcel, pero que tengamos que estar peleando y luchando algo que es tan obvio como que cumplan hasta el último día de su condena, es lamentable. Espero que no sea así, pero más pronto que tarde me temo que habrá noticias de que se le ha concedido alguna salida al asesino de mi hermano cuando ni muestra arrepentimiento ni colaboración con la justicia ni perdón. Se siente orgulloso de su pasado, de haber matado. Recuerdo que, cuando ETA anunció el cese de la violencia, pidió en un comunicado que se continuara con la lucha armada. Yo comprobé en su cara su orgullo cuando le vi en la pecera en la Audiencia Nacional, él y su pareja Gallastegui".

"Posiblemente, dentro de poco vea a Txapote cómo pasea por las calles de su pueblo con su familia mientras yo no puedo pasear ni por Galicia ni por ningún otro lado con los míos"

Las expectativas no se mimetizan con el color níveo de aquellas manos que simbolizaron la paz. "Veo el horizonte muy negro. Tanto que, desgraciadamente, todo lo que vemos en referencia a Víctimas del Terrorismo me ha llevado a preguntarme en más de una ocasión, cuando se han cumplido 25 años del secuestro y asesinato, si la muerte de mi hermano ha servido para algo. Y me lo pregunto porque veo que al final sus asesinos están en el País Vasco, a mi hermano lo tuvieron que llevar a Galicia porque ni siquiera muerto le dejaban descansar en paz, porque le rompían el cristal de la tumba, le destrozaban las flores. Mi madre llegó un momento en que no podía más. Y ahora tengo ir a visitar a mi hermano y mis padres a Galicia, pero su asesino está muy cerca de su familia en el País Vasco y, posiblemente, dentro de poco le vea cómo pasea por las calles de su pueblo con su familia mientras yo no puedo pasear ni por Galicia ni por ningún otro lado con los míos. Veo que hay una clara intención de blanquear a ETA, de borrar su pasado, de borrar todo el reguero de sangre que han dejado a lo largo de tantos años, de silenciar a las víctimas. El alcalde de mi  pueblo, con el beneplácito del presidente del gobierno, no quería que yo hablara en el acto del 25 aniversario en el que fui por acompañar y agradecer la presencia de Su Majestad el Rey, a quien agradecí que 25 años después estuviera en Ermua y también que, cuando era Príncipe de Asturias, nos acompañara en un día tan difícil como el del entierro de mi hermano. Y para alzar la voz con lo que pensamos la inmensa mayoría de las víctimas del terrorismo, que no se puede humillar de la manera que está haciendo este gobierno la memoria y la dignidad de las víctimas del terrorismo. Ayer salió una noticia de que el juez García Castellón iba a procesar a Iñaki de Rentería como uno de los autores intelectuales del secuestro y asesinato de mi hermano. Y esa noticia me llevó a escribir que, por fin, después de tanto tiempo, una buena noticia para la memoria y dignidad de las víctimas del terrorismo, cuando lo normal sería que todas las noticias fueran en positivo para las víctimas y no para los asesinos, que es lo que estamos viendo".

No queda tiempo. Tan sólo para la paradoja de la Europa antaño poco comprensiva con España frente al terrorismo, hoy impulsora de una iniciativa rechazada posteriormente en el Congreso de los Diputados. "El Parlamento Europeo dice que hay que investigar los más de 300 crímenes que siguen a día de hoy sin sentencia judicial. Y presenta el otro día una iniciativa el PP, que da igual el partido que fuera, en la Comisión de Interior para que se sigan investigando y se persiga a los jefes de ETA con el objetivo de que no prescriba el delito y se le pueda juzgar, y el PSOE que en Europa vota que hay que investigar en el Congreso de los Diputados vota en contra de que se llegue hasta el final en el ámbito de la justicia y la verdad de lo sucedido en esos 300 crímenes que no tienen sentencia. Por eso digo que las víctimas lo vemos muy negro porque hay interés por parte del PSOE y del Gobierno de hacer un blanqueamiento de Bildu, borrar la culpa y olvidar el pasado. Prueba de ello es la Ley de Memoria Democrática, donde se obvia cada atentado cometido y a las víctimas del terrorismo y la historia más reciente de nuestro país".

 

 

 

 

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