El Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales de Aragón (Cogitiar) celebró esta semana su tradicional acto de fin de año en Huesca. Este evento, que tuvo lugar el pasado jueves, contó con la participación de colegiados y ciudadanos de la provincia, y sirvió para reflexionar sobre los logros alcanzados durante el año y dar la bienvenida a nuevos retos.
La jornada arrancó con una conferencia impartida por el psiquiatra y profesor Javier Olivera en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, quien ofreció una charla sobre la gestión de las emociones, un tema de gran relevancia tanto en el ámbito personal como profesional.
Luis Marquina, presidente del Colegio, fue el encargado de abrir el acto, que se concibe como una oportunidad, no sólo para reunir a los asociados, sino también para acercar la ingeniería y sus profesionales al público general.
Después, la celebración se trasladó al salón social del Colegio, recientemente remodelado, donde se procedió a la entrega de premios del concurso de fotografía infantil, una actividad que ha permitido involucrar a los hijos de los colegiados, y se sirvió un vino español.
Completadas en septiembre, las obras han modernizado por completo el espacio, incorporando tecnología de vanguardia para facilitar la conexión con los colegiados de la provincia, especialmente aquellos que residen en áreas más dispersas. Marquina subrayó que esta renovación no solo ha sido estética, sino que también responde a la necesidad de adaptar el Colegio a las nuevas demandas tecnológicas, ofreciendo un espacio más accesible y funcional.
En cuanto al balance de este 2024, Marquina considera que, aunque aún es prematuro hacer una valoración completa, los resultados hasta ahora son positivos. El número de colegiados ha aumentado, lo que refleja el éxito de las iniciativas llevadas a cabo, especialmente entre los jóvenes. Además, el año ha sido excepcional en términos presupuestarios, manteniendo la estabilidad financiera pese a los retos del entorno económico.
Con la remodelación del salón social, el Colegio ha buscado mejorar la experiencia de sus colegiados y seguir ofreciendo oportunidades de formación y desarrollo profesional. Marquina observa que, aunque el sector sigue afrontando desafíos, el Colegio continúa trabajando con el objetivo de ser un referente para la ingeniería técnica industrial en Aragón.