Las iniciativas de parques eólicos sobrevuelan el municipio desde principios de los años 2000, pero no fue hasta agosto del 2020 cuando se registraron en el Ayuntamiento de Peralta de Alcofea los proyectos que ahora se están construyendo, con posteriores modificaciones para cumplir con todos los condicionantes medioambientales y urbanísticos. Desde entonces, han transcurrido tres años en los que la iniciativa se ha ido concretando y el alcalde, Sergio Gambau, ha liderado unas arduas negociaciones que han fructificado con Repsol en una importante compensación para el municipio, que integra los pueblos de Lagunarrota y El Tormillo.
El primer edil resume las cifras tras el trabajo de regularización de impuestos y la creación de una nueva ordenanza de prestación patrimonial de aprovechamiento de suelo no urbanizable (SNU), además de otras negociaciones. “Se han multiplicado por cuatro los ingresos previstos inicialmente”, explica y concreta que “se ha pasado de los 1,5 millones de euros iniciales a un total de 6,35 millones”. El siguiente paso va a ser comenzar las reuniones con los vecinos para realizar un proyecto de desarrollo integral del municipio.
La nueva ordenanza municipal que el Ayuntamiento elaboró tras un trabajo de estudio de todas las posibilidades existentes y que se dirige a empresas que producen y comercializan energía en terrenos no urbanizables, y al mismo tiempo para que no afecte a otro tipo de industrias y vecinos, es la que principalmente ha permitido que el Consistorio incremente tanto sus ingresos.
Paralelamente a llegar a concretar esta ordenanza, la negociación durante más de seis meses sobre las compensaciones sociales para el municipio no avanzaba. Gambau sólo encontraba respuestas negativas por parte de la empresa a las solicitudes municipales para favorecer de distintas formas a los vecinos. “Planteamos que había que llegar a un acuerdo en las compensaciones sociales a través de beneficios energéticos y creación de infraestructuras para el municipio o una segunda opción que era la aportación del 5 % del valor de la obra", por la que finalmente optó Repsol.
Si ha llevado mucho trabajo e investigación llegar hasta este punto, el Ayuntamiento se encuentra ahora con la importante labor de destinar ese capital al desarrollo de todo el municipio, para lo que va a contar con todos los vecinos en la tarea de fijar proyectos y el apoyo de la empresa Ixambre de Artieda, una cooperativa que trabaja en este tipo de desarrollos.
El alcalde de Peralta de Alcofea plantea alguna de las cuestiones que podrían abordarse como la creación de instalaciones fotovoltaicas para favorecer energéticamente a vecinos y empresas existentes y nuevas que se quieran asentar en el municipio, subvencionar la eliminación de barreras arquitectónicas en las viviendas de las personas mayores, promoción de nuevas viviendas, seguir ampliando zonas verdes e instalaciones deportivas… “Pero no tiene que ser el alcalde el que decida u ordene la prioridad de las actuaciones, queremos las opiniones e ideas de todos los vecinos”, ha señalado.
El miércoles se lleva a cabo la primera reunión con representantes de los grupos creados, a las que seguirán mesas de trabajo por tramos de edades, distintas asociaciones, vecinos de Lagunarrota y El Tormillo, inmigrantes residentes en el municipio y también a los más jóvenes “que son el futuro”.
Como ha explicado el alcalde, “tendremos las conclusiones en 3 o 4 meses. No tenemos prisa porque ya estamos acometiendo varias obras que son necesarias, como la red de agua potable, trabajos en la escuela, en el Ayuntamiento, en los locales sociales de Lagunarrota y El Tormillo…”.
Gambau destaca que el municipio ha pasado de contar con un presupuesto sin apenas recursos propios y de llevar a cabo actuaciones “dependiendo siempre de subvenciones” a contar con un importante patrimonio "que hay que gestionar de una manera sensata y ordenada para el desarrollo del municipio", que también contará con nuevos ingresos anuales por el impuesto de actividades económicas (IAE) de los parques eólicos.
En concreto, la obra que ya ha comenzado a tomar forma, está dividida en varios parques que suman 19 aerogeneradores, de los que 12 se ubican en los sasos de El Tormillo y Lagunarrota, 2 en Berbegal y 5 en Sariñena.