La Coordinadora de Asociaciones y Entidades del Barrio del Perpetuo Socorro, formada por la Asociación Vecinal, la Parroquia, el Colegio Pío XII y su AMYPA, Secretariado Gitano, Cruz Blanca, Cáritas, la Biblioteca Ramón J. Sender y la Ludoteca Candeleta, tiene previsto registrar este martes un documento dirigido a todos los grupos municipales del Ayuntamiento de Huesca. En él reclama que los Presupuestos Municipales de 2026 incluyan tanto la ejecución de las actuaciones ya aprobadas como nuevas intervenciones consideradas indispensables para el barrio.
La Coordinadora subraya que el Perpetuo Socorro arrastra desde hace años deficiencias urbanísticas, retrasos en obras públicas y un deterioro persistente en los espacios comunes. Entre las actuaciones prioritarias destaca la reposición de árboles en los alcorques vacíos, la mejora integral de la calle Gibraltar, con la ampliación de la plaza y de las aceras, y la urgente reparación de las aceras de la calle Valencia, especialmente en el tramo comprendido entre San Vicente de Paúl y Pío XII. También solicita la instalación de aparcabicicletas en puntos estratégicos y un refuerzo de la seguridad vial en torno al Colegio Pío XII, la Parroquia y el Centro Cívico Santiago Escartín Otín, mediante bandas rugosas y señalización más visible.
Estas demandas, recuerdan, no son nuevas, sino reivindicaciones reiteradas ante el Ayuntamiento sin que los compromisos adquiridos se hayan traducido en obras reales. La Coordinadora insiste en que el barrio “necesita hechos, no anuncios”.

El documento también repasa las actuaciones ya presupuestadas para 2025 que siguen sin ejecutarse. Explica que ha sido “a través de la prensa”, y no mediante comunicación municipal, como han conocido el trámite de la intervención prevista en el acerado de la calle Gibraltar. Sin embargo, subrayan que este avance parcial es insuficiente, porque en muchas calles del barrio las aceras y calzadas presentan un estado “muy deteriorado”.
A ello se suma la ausencia de progresos en la rotonda de las Balsas de Chirín, el retraso acumulado en la segunda fase del Paseo Ramón y Cajal, descrito como “una boca de lobo” por la noche, y la paralización de las obras previstas en el parque de la calle Zacarías Martínez, que debían haberse ejecutado ya en 2024.

La única nota positiva que reconocen es la ampliación de la partida destinada al Plan Director del Parque Joaquín Roig, redactado por el arquitecto Sixto Marín y la técnica municipal Ana Pérez, que ha pasado de 40.000 euros a un total de 110.000. Pese a ello, la Coordinadora advierte de que este proyecto requerirá nuevas inversiones en los próximos años para completarse.
El punto más crítico del escrito se centra en la situación de la Biblioteca Municipal Ramón J. Sender, cuyo cierre parcial se prolonga desde hace 21 meses por los problemas estructurales en el techo de la sala principal. La Coordinadora denuncia la ausencia de avances en su reparación y exige al equipo de gobierno, encabezado por el PP, la reapertura inmediata de la biblioteca, un espacio que considera esencial para la vida cultural del barrio y de la ciudad.

El cierre afecta especialmente a estudiantes de Secundaria y Universidad, familias, personas mayores y usuarios con discapacidad que empleaban la biblioteca como lugar de estudio, consulta y socialización. También perjudica a las numerosas actividades que se desarrollaban en el Centro Cívico, entre ellas clubes de lectura, talleres de conversación, charlas, exposiciones, juegos de mesa, cuentacuentos, iniciativas educativas y proyectos de convivencia. La Coordinadora insiste en que la biblioteca es un pilar cultural insustituible y que su clausura prolongada “no puede normalizarse”.
Recuerdan además que el Pleno municipal aprobó el 30 de abril la reapertura de la sala en septiembre del año siguiente, un acuerdo que el gobierno municipal no ha cumplido.
La licitación anunciada en otoño, con una partida de 200.000 euros, quedó desierta, lo que incrementa la preocupación vecinal. La Coordinadora plantea una pregunta directa, “¿Ocurriría esto en la Biblioteca Durán Gudiol o en otros equipamientos culturales de la ciudad?”, con la intención de poner en evidencia el agravio comparativo que sienten.
Para evitar nuevos retrasos, exigen que la reparación figure de forma expresa en los Presupuestos de 2026 y que se adopte un procedimiento eficaz que garantice la ejecución del proyecto sin más dilaciones.
Ante la falta de avances concretos, las entidades anuncian un calendario de movilizaciones periódicas. Cada quince días, los miércoles a las 19:00 horas, se celebrarán concentraciones -que ya se han iniciado- frente a la Biblioteca Ramón J. Sender, con la próxima convocada para el 10 de diciembre. Afirman que continuarán movilizándose “el tiempo que sea necesario”, porque, insisten, “la cultura no puede seguir esperando”.
La Asociación de Vecinos recuerda que muchas de estas demandas ya fueron trasladadas en 2023 y reiteradas en la reunión mantenida con la alcaldesa en enero de 2024, así como ante los grupos municipales, todos salvo el PP, que no concedió un encuentro específico, y más tarde al concejal de Hacienda a finales del año pasado.
Para la Coordinadora, el barrio del Perpetuo Socorro no reclama privilegios, sino el cumplimiento de los compromisos adquiridos y una atención institucional acorde con las necesidades reales de sus vecinos. “La ciudadanía tiene derecho a servicios públicos dignos, a equipamientos culturales plenamente operativos y a una ciudad que no deje atrás a ninguno de sus barrios”, concluyen.