Riegos del Alto Aragón reclama que la planificación del agua mire “personas, territorios y compromisos históricos”

La directora general del Agua ha afirmado en la jornada de los regantes que se trabaja en la buena dirección pero que "es necesario un esfuerzo complementario, hacer más con menos"

Periodista
30 de Octubre de 2025
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Apertura de la jornada informativa de Riegos del Alto Aragón, con Pradas, Orduna y Pascual. Foto Mercedes Manterola
Apertura de la jornada informativa de Riegos del Alto Aragón, con Pradas, Orduna y Pascual. Foto Mercedes Manterola

Riegos del Alto Aragón ha celebrado este jueves en Huesca su 27 Jornada Informativa con el título "Agua, agricultura y futuro: Regadíos resilientes ante los desafíos globales", que ha reunido a centenares de regantes para debatir sobre aspectos de gran interés como la adaptación a los nuevos escenarios climáticos e hidrológicos, el refuerzo de la soberanía alimentaria y energética y el Plan Hidrológico del Ebro 2028-2033, que plantea una reducción de las dotaciones para riego.

En la apertura de la jornada, la directora general del Agua del Ministerio de Transición Ecológica, Dolores Pascual, ha señalado sobre este último polémico punto que “es una cuestión que debe debatirse en el proceso de revisión de los planes hidrológicos”, y ha puesto el acento en la “eficiencia en la utilización del agua. Es imprescindible hacer más con menos, más allá de las dotaciones específicas que pueden plantearse”. La rebaja ha sido puesta en cuestión en la clausura tanto por el consejero de Agricultura del Gobierno de Aragón, Javier Rincón, quien ha señalado que los estudios presentados “infravaloran las necesidades reales de Aragón y comprometen su futuro”, como el presidente de Riegos del Alto Aragón, José Antonio Pradas, para quien “reducir dotaciones no disminuye la demanda y penaliza el esfuerzo inversor”. En su reflexión final, Pradas ha pedido que “la planificación y la legislación no solo miren cifras, sino también personas, territorios y compromisos históricos”.  

La jornada de la comunidad de regantes ha contado, además de con Pascual y Rincón, con la asistencia de la alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, el director técnico de la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), Víctor Morales, la diputada nacional del PP Ana Alós, el director general de Desarrollo Rural, José Manuel Cruz, el presidente de la Diputación de Huesca, Isaac Claver, el subdelegado del Gobierno en Huesca, Carlos Campo, el delegado territorial, Javier Betorz, la vicepresidenta de la DPH, Celsa Rufas, y concejales de Huesca, entre otros representantes institucionales.

José Antonio Pradas, Lorena Orduna y Dolores Pascual, en la inauguración de las jornadas de Riegos del Alto Aragón. Foto Mercedes Manterola
José Antonio Pradas, Lorena Orduna y Dolores Pascual, en la inauguración de las jornadas de Riegos del Alto Aragón. Foto Mercedes Manterola

La actividad, moderada por el periodista agroalimentario José María Paraled, se han desarrollado en el Palacio de Congresos, donde también se han instalado estands informativos y técnicos. A las puertas se han concentrado los regantes de Salillas y Huerto, que no quieren dejar de protestar “por una injusticia”, debido las afecciones en sus tierras de las obras de modernización de los sectores X y XI del Canal del Flumen, que ya están en marcha.

"TENEMOS QUE SER MEJORES DE LO QUE YA SOMOS"

En su intervención, la directora general del Agua de Ministerio para la Transición Ecológica, Dolores Pascual, ha puesto de manifiesto que, ante el cambio climático, “la adaptación en el regadío no es una opción”. Otra cosa -ha añadido- son las herramientas que utilicemos para llegar ahí”. Ha transmitido a los regantes que el esfuerzo que están haciendo va en la buena dirección, pero “no es suficiente -ha dicho-. El cambio climático está aquí y tenemos que incorporar esa incertidumbre si queremos mantener la actividad económica y la satisfacción de las necesidades de la población. Tenemos que ser mejores de lo que ya somos”. Ha citado la línea que marca la Comisión Europea con el objetivo del 10 % de eficiencia hídrica, en la que está trabajando el regadío español, “pero es necesario un esfuerzo suplementario, hacer más con menos”, ha remarcado.

Pascual ha alabado la “historia, adaptación, transformación y visión de futuro” de Riegos del Alto Aragón, y ha citado los retos afrontados y los avances logrados, en colaboración con la administración, para conseguir la resiliencia en el regadío. Además, ha marcado retos importantes. En este sentido, ha citado la colaboración que la administración hidráulica tiene con los usuarios de la Cuenca del Ebro, especialmente con Riegos del Alto Aragón, en la “búsqueda de soluciones para la medición y reducción de nitratos en los retornos de riego, que nos ayudará a hacer mejores diagnósticos y adoptar mejores soluciones en la lucha contra la contaminación difusa, uno de los mayores problemas ambientales de la Cuenca del Ebro”, ha afirmado Pascual.

Se ha referido a los periodos de sequía sufridos, como en 2023, en la que un elemento diferencial fue “una actitud responsable y proactiva, que nos ha permitido tomar medidas para superar este fenómeno reduciendo pérdidas y conflictos. Una buena gobernanza interna de los propios sistemas de riego es esencial para poder superar episodios de sequía”, ha señalado. 

Dolores Pascual durante su intervención.
Dolores Pascual durante su intervención.

Ha continuado la directora general del Agua haciendo referencia a la necesidad de ser capaces de “incorporar a todos los procesos de gestión la incertidumbre asociada al cambio climático. La sociedad crece y demanda más agua, tenemos un problema de contaminación que lleva años acumulándose en nuestras aguas subterráneas. Es imprescindible cambiar la perspectiva -ha reclamado-. Y nuestro trabajo debe hacerse sobre pilares actualizados que incorporen una visión de futuro seguro y próspero”. Los objetivos de esos pilares son “resistencia hídrica y sostenibilidad”, ha citado.

Pacual ha considerado que, para estas nuevas perspectivas, las soluciones serán las que se basen en ciencia, investigación y tecnología, que “incorporará nuevas técnicas para modernizar aun más los sistemas de regadíos y las infraestructuras del agua, y que aproveche esas nuevas tecnologías para llegar a ese objetivo del 10 % de eficiencia en 2030 que marca la Comunidad Europea”.

En este sentido, ha apuntado que ya se han dado pasos adelante, con la aprobación de la estrategia de resiliencia hídrica con el fin de reforzar la capacidad de adaptación”. Para afrontar con inversiones estos retos, Pascual se ha referido a que la estrategia también incluye nuevas herramientas para ayudar a los países miembros ante los retos del cambio climático, para ayudar a los usuarios en ese obligado proceso de transformación en el que estamos inmersos”.

Pascual ha recordado que, con las inversiones realizadas en digitalización, el regadío español es más sostenible y rentable y “ha marcado una línea que se debe continuar”. Ha pedido a los beneficiarios de subvenciones de los PERTE “un esfuerzo añadido para ejecutar esos proyectos en los plazos marcados por la UE”.

También se ha referido a las inversiones en mantenimiento y conservación de infraestructuras, con un “esfuerzo muy relevante económico, humano y de gestión”. Actualmente, se ejecutan 32 millones de inversión en mantenimiento y seguridad de presas en la cuenca del Ebro y 28 millones en el mantenimiento de los canales, a través de la Dirección General del Agua y la CHE, y "algunas tan relevantes como la de El Grado".

27 Jornada informativa de Riegos del Alto Aragón.
27 Jornada informativa de Riegos del Alto Aragón.

Dolores Pascual ha valorado el trabajo que se desarrolló en los planes hidrológicos del tercer ciclo, y se ha referido a que los de cuarto ciclo, del periodo 2033 al 2045, “deben incorporar procesos de adaptación al cambio climático de forma transversal, previa identificación de zonas fuertemente tensionadas o que van a estarlo, estableciendo herramientas que nos permitan superar esa reducción”.

“Identificar los problemas que tendremos a corto plazo nos va a permitir adelantarnos y evitar prácticas mal adaptativas en estas zonas, como el aumento indiscriminado de superficies o una excesiva intensificación de regadíos. Los planes del cuarto ciclo deben ser el resultado de un principio de cautela con adaptación a los recursos realmente existentes. Si no respetamos esta premisa -ha advertido-, podemos encontrarnos con cuencas sobreexplotadas, que nos pueden abocar a un futuro dominado por situaciones de crisis hídricas permanentes, como ya pasa en algún territorio de España”.

Pascual ha señalado que desde el Ministerio se es consciente de las dificultades que se imponen a la agricultura y que “es imprescindible un apoyo por parte de las administraciones estatales, autonómicas o incluso locales, para responder de forma responsable a las exigencias ambientales o de la PAC”. En este sentido, “queremos seguir trabajando con los regantes y las comunidades de regantes -ha asegurado-. En esta línea, la renovación del Plan Hidrológico del Ebro para el 2028-2033, tiene que ser un proceso de reflexión colectiva, de diálogo, como ha sido siempre, entre los usuarios y la administración hidráulica y contando con los mejores mecanismos de participación y colaboración”.

“El regadío debe ser un aliado estratégico en el diseño y ejecución de las políticas públicas”, ha señalado. “La búsqueda de soluciones en común es la primera herramienta para encontrarlas. Si algo nos enseña la historia de la gestión del agua, con diálogo y visión de futuro somos capaces de buscar soluciones a grandes problemas”, ha culminado la directora general del Agua.

"EL AGUA QUE NO SE REGULA SE PIERDE"

En la clausura, el consejero de Agricultura del Gobierno de Aragón, Javier Rincón, ha llamado la atención sobre que año hidrológico que acaba de terminar ha sido excepcionalmente lluvioso, y sin embargo, os embalses están actualmente a menos del 53 % de su capacidad. “Una paradoja que nos obliga a preguntarnos con honestidad: ¿qué estamos haciendo con el agua?. Seguimos sin contar con las infraestructuras de regulación hiperanuales que nos permitirían transformar años como este en una oportunidad para garantizar el riego, el abastecimiento y la resiliencia de nuestro sistema agrario en los años más secos”. “Porque el agua que no se regula se pierde -ha añadido-. Y en un territorio como el nuestro, una comunidad en la que no sobra una gota de agua, no nos lo podemos permitir. No cesaremos en nuestro empeño de reivindicar la finalización y la puesta en marcha lo antes posible de todas las obras hidráulicas pendientes en Aragón desde hace décadas”.

Como ejemplo ha citado la regulación del río Gállego, y ha preguntado si "se van seguir dejando pasar oportunidades como esta o vamos a empezar a tomarnos en serio la gestión del agua como lo que es, una cuestión estratégica para el presente y el futuro de Aragón”. En este sentido, ha considerado urgente poner en marcha el embalse de Almudévar, además de concluir el recrecimiento de Yesa y la puesta en servicio del embalse de Mularroya.

Rincón se ha referido, por otra parte, al trabajo desarrollado desde su departamento en coordinación con el Instituto Aragonés del Agua en la presentación de alegaciones al inicio del proceso de planificación hidrológica de cuarto ciclo impulsado por la CHE, “que nos preocupa profundamente -ha señalado-, especialmente por el planteamiento de recortar en torno al 12 % aproximadamente la dotación media de agua para riego en la cuenca del Ebro. Como suelo decir, no se pueden cambiar las reglas de juegos a mitad de partido. El regadío necesita estabilidad y confianza, no incertidumbre, ni penalizaciones injustificadas. Y para lograrlo necesitamos infraestructuras que funcionen, planificación que respete al territorio y decisiones que estén a la altura de los retos que enfrentamos”, ha dicho.

El consejero aragonés Javier Rincón, en la clausura.
El consejero aragonés Javier Rincón, en la clausura.

En las alegaciones se señala que “los estudios presentados infravaloran las necesidades reales de Aragón y comprometen nuestro futuro. Reclamamos -ha señalado Rincón- flexibilidad y capacidad de respuesta ante una realidad agrícola cambiante y exigimos que se abra un debate real, participativo y transparente con todos los agentes implicados, incluyendo, por supuesto, las comunidades de regantes, para definir juntos el futuro del regadío en la cuenca del Ebro”.

El consejero aragonés ha profundizado señalando la preocupación por la intención del Gobierno central de que la reducción de dotaciones se aplique a todas las concesiones, “sin excepción, tanto a las ya existentes como a las futuras. Esto supondría un cambio radical en las condiciones de acceso al agua para riego, que afectaría directamente a la planificación, inversión, amortización y sostenibilidad de las explotaciones agrarias”.

La preocupación es mayor en un marco como el que plantea la Comisión Europea para la PAC en el periodo 2028-2034, al que el Gobierno de Aragón “se opone frontalmente. “Una PAC que no menciona la modernización de regadíos ni el apoyo a la industria agroalimentaria y que pone en riesgo el desarrollo rural y la soberanía alimentaria”, ha alertado.

DEFENDER UN SISTEMA QUE FUNCIONA

Por su parte, José Antonio Pradas, presidente de la Comunidad General de Riegos del Alto Aragón, ha señalado en la clausura que “las soluciones efectivas frente a problemas requieren un reparto claro de responsabilidades y coordinación entre administraciones hidráulicas y agrarias. No se trata de negar problemas, sino de preservar lo que funciona, fortalecer principios fundamentales mediante innovación y respetar nuestro marco estatutario. En la reforma de la Ley de Aguas, pedimos que se mantenga esta coherencia y que el legislador analice las verdaderas causas de los problemas, especialmente respecto a las comunidades de usuarios, que no somos un interlocutor más, somos parte activa del sistema hidráulico, conocedoras del territorio, de sus limitaciones y de sus oportunidades”.

Ha recordado Pradas que la sequía es la principal amenaza que el sistema ha sufrido por primera vez dos periodos consecutivos (2021-2022 y 2022-2023). “Evitar la sequía es imposible. Nuestro deber es planificar y maximizar la eficiencia del agua disponible, haciendo que cada gota cuente”, ha dicho.

José Antonio Pradas.
José Antonio Pradas.

Pradas ha señalado que la eficacia del Plan de Gestión de Situaciones de Escasez ha sido reconocida por la CHE y por la declaración ambiental estratégica y ha apuntado que el esfuerzo inversor “ha estabilizado y reducido la demanda de agua. El consumo real está muy por debajo de la dotación asignada en los planes hidrológicos, liberando recursos que se gestionan mejor gracias a la modernización y la eficiencia tecnológica. Reducir dotaciones, sin embargo, no disminuye la demanda y penaliza el esfuerzo inversor -ha afirmado-. La reconversión de cultivos y la adopción de técnicas más eficientes son fruto de la adaptación individual de los agricultores que debe ser respaldada y no desincentivada. El agua no consumida puede convertirse en activo mediante embalses de regulación hiperanuales, aportando seguridad y flexibilidad”, ha trasladado.

Ha añadido que el sistema del Alto Aragón no presenta escasez estructural, sino “irregularidad interanual y estacional”, y que “la eficiencia lograda permite liberar recursos y aprovechar cada metro cúbico. Esto nos legitima -ha señalado- para seguir planteando obras de regulación, garantizando un recurso que hoy es más que nunca irregular”.

También se ha referido a los desafíos, como la sequía, los fenómenos extremos, la necesidad de regulación inteligente y la coordinación interadministrativa. "Estos retos nos recuerdan que la gestión del agua no puede desligarse de la realidad del territorio, ni de quienes convivimos con él día a día. Reclamamos respeto por nuestros principios, por nuestro marco estatutario y reconocimiento de nuestra experiencia, porque ahí reside la verdadera eficiencia y la sostenibilidad. Pedimos que la planificación y la legislación no solo miren cifras, sino también personas, territorios y compromisos históricos. Ahí está la auténtica fortaleza de nuestro sistema”.

Ha terminado deseando que el centenario que ha celebrado la Comunidad de Regantes de Almúdevar y el próximo de la CHE inspiren a “continuar invirtiendo, innovando y defendiendo un sistema que funciona, que protege el territorio, que respeta a sus usuarios y que asegura el agua para quienes vendrán después. Sigamos juntos -ha pedido- construyendo un futuro en el que cada gota cuente, cada decisión importe y cada generación pueda seguir gestionando este recurso con orgullo y responsabilidad”.

ATRAER TALENTO

La alcaldesa de Huesca, ha inaugurado la jornada, ha alabado la labor de Riegos del Alto Aragón como "motor de cambio y futuro" y ha apostado por "políticas para modernizar la estructura de canalización y regadíos que impulsan la economía agrícola y ganadera de nuestro territorio y que pueda servir también para atraer y fijar talento". Se ha referido especialmente a los jóvenes que "pueden ver nichos de trabajo unidos a la tecnificación de estos sistemas atractivos para el futuro". 

 

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