El Colegio Oficial de Veterinarios de Huesca ha llevado a cabo este domingo una manifestación en la capital oscense para reivindicar el papel esencial de la profesión veterinaria y protestar contra la normativa estatal que “pone en grave riesgo la salud pública, la salud animal y la continuidad del ejercicio profesional”, como han denunciado. La movilización, acompañada por pitos y el sonido de un cencerro, forma parte de una convocatoria nacional que ha reunido a profesionales del sector en distintas ciudades españolas.
En Huesca, la protesta ha comenzado en la plaza Cervantes, frente a la Subdelegación del Gobierno, y ha recorrido la calle del Parque hasta desembocar en la plaza Navarra. Allí, los manifestantes han leído un manifiesto en el que han alzado la voz “por quienes no pueden hablar: los animales, por las familias que los cuidan y aman, y por una profesión esencial que está siendo injustamente atacada”.
Los veterinarios han denunciado especialmente el Real Decreto 666/2023 y el sistema Presvet, que regula la prescripción de medicamentos veterinarios. Considera la norma "injusta, desproporcionada, burocrática y ajena a la realidad". Apuntan que impone una carga burocrática desproporcionada y alejada de la realidad clínica, limita la libertad de prescripción y dificulta la atención adecuada a los animales, además de favorecer la aparición de resistencias antimicrobianas.
“El sistema actual nos obliga a seguir tratamientos basados en fichas técnicas desactualizadas, limita el uso de antibióticos y nos impide ajustar dosis a las necesidades de cada paciente”, denuncian. Además, critican que la normativa genera sobrantes de medicamentos, encarece los tratamientos con un IVA del 21 % y castiga con sanciones de hasta 1,2 millones de euros por errores administrativos.
A juicio del colectivo veterinario, este marco normativo no solo compromete la salud animal y humana, sino que está provocando un creciente abandono de la profesión. “Muchos compañeros están pensando en dejar su trabajo porque no pueden más”, han advertido durante la lectura del manifiesto.
Entre sus principales reivindicaciones, exigen la modificación inmediata del Real Decreto y del sistema Presvet, la posibilidad de suministrar directamente los medicamentos en las clínicas veterinarias hasta completar el tratamiento, mayor flexibilidad en la prescripción basada en la evidencia científica, y la reducción del IVA al 10 % para los servicios veterinarios.
Los convocantes han pedido también el respaldo de la ciudadanía, recordando que esta lucha también afecta a las familias. “Porque la salud de vuestros animales está en juego. Porque un veterinario sin libertad no puede proteger y cuidar a su paciente. Porque la salud de todos empieza por la salud de los animales”, han concluido.
