Mercedes Gabarre y Beatriz López atesoran una larga trayectoria artística, Mercedes con la pintura y Beatriz, con la fotografía. Les une la amistad, ese amor por el arte y el irrefrenable deseo de seguir creando y creando, que nace de unas cabezas en permanente ebullición, una profunda necesidad vital de expresarse y una energía a prueba de bombas.
De toda esa fuerza volcánica ha surgido un nuevo proyecto, "2 en Goya", un almacén que atesora sus obras en la calle oscense del mismo nombre, y que se muestra al público como una pequeña bombonera en una de las arterias con mayor solera de la capital altoaragonesa. No es una tienda ni una galería, simplemente exhiben sus creaciones y les permite entrar en contacto con el público. El teléfono -para posibles adquisiciones- está visible en el escaparate (pintura: 615924811 y fotografía:627570651).
Explican que su objetivo es "enseñar, motivar y educar la vista", pero recalcan que "sin pretensiones", simplemente con la intención de fomentar cierta pedagogía. Desean que la gente amplíe su mirada mientras pasea por la calle y le dé cabida a todo, hasta a lo más cotidiano. Su objetivo es "acercar el arte a la vida diaria".
Beatriz y Mercedes consideran, además, que acostumbrando al vecindario a contemplar y a comprar obras -para un regalo de cumpleaños, de boda o de comunión, por un capricho o una necesidad-, pueden fomentar la idea de que el arte es accesible y no tiene por qué ser "elitista". Si la idea evoluciona y se cumplen los objetivos, se plantean la posibilidad de ofrecer talleres.
Las dos van a participar este 22 de junio en las Veladas Violetas que organiza el Instituto Aragonés de la Mujer, en la plaza San Pedro, a las 22:00, donde abordarán sus diversas y comunes experiencias.
ARTE Y FOTOGRAFÍA
Además del enfoque didáctico y formativo, "2 en Goya" muestra la diversidad que existe en el campo artístico, al combinar la pintura y la fotografía. Beatriz enfoca el objetivo de su cámara, especialmente, hacia el ámbito teatral y de los alimentos, mientras que Mercedes concentra su inspiración y su trabajo en los pigmentos naturales y el papel.
Beatriz López descubre la belleza en los elementos cotidianos, saca los alimentos de su contexto habitual y les da otra dimensión. Así, unas patatas fritas, una copa de vino, la pasta, la cerveza, los huevos o un corcho se convierten en algo singular y excepcional.
Mercedes Gabarre, por su parte, utiliza una técnica que se basa principalmente en el papel, haciendo collage y decoupage. Incorpora elementos orgánicos a sus obras, en respuesta a su conexión con la naturaleza. Su trabajo se centra en elementos habituales de la tierra, como la vegetación, la luz, el crecimiento y la vida que representa. Utiliza tinta china, monotipos y también moldea esculturas. Este espacio le brinda la oportunidad de seguir enseñando y mostrando sus piezas, porque, aunque considera que una obra no requiere ser contemplada para florecer, quiere evitar que se queden dormidas en el taller.
En definitiva, un nuevo espacio en la ciudad de Huesca, donde la personal mirada de dos creadoras con mucha experiencia y sensibilidad nos acerca el arte a la calle y lo introduce en nuestra vida cotidiana.