Honrar las maestras del cuidado, de Alicia Gallán Elfau, es un libro compuesto por nueve relatos de ficción que ponen en valor un saber cultural ancestral: el conocimiento del cuidado, un saber que tradicionalmente ha estado en manos de las mujeres y que, aunque esencial para la vida, ha sido históricamente invisibilizado y poco reconocido socialmente.
La autora, formadora y consultora en igualdad, aborda este tema desde una doble perspectiva. Por un lado, como profesional que ha estudiado y trabajado en torno a las desigualdades de género; por otro, como escritora que utiliza el relato como herramienta para dar voz a aquellas mujeres, especialmente las abuelas, que han dedicado su vida al cuidado y cuyos testimonios suelen quedar fuera de los discursos académicos o económicos.
En la presentación del libro, realizada este jueves, con motivo del inicio de las fiestas del barrio Santiago de Huesca, y acompañada por Montse Consejo, miembro de la Junta Directiva de la Asociación de Vecinos, Alicia Gallán ha explicado que su motivación principal para escribir esta obra surgió de un vacío que percibió durante su formación académica. “Cuando estudiaba todo esto me faltaba siempre la voz de las expertas, sobre todo de las abuelas, de las mujeres que habían dedicado toda su vida al cuidado”.
Para ella, es imprescindible "resignificar y revalorizar esa experiencia" que, aunque cotidiana, es la base que sostiene a la humanidad: “Es necesario presentar esta parte de la vida que ahora parece que podemos pasar sin ella, pero que sigue siendo imprescindible. Lo que nos ha traído hasta aquí desde hace miles y miles y miles de años, y que las mujeres nunca hemos dejado de hacer. Y las que más saben sobre este tema son, en especial, las más mayores”.
A través de relatos que reflejan situaciones cotidianas, pero también heroicas en su dimensión humana, Alicia Gallán intenta que las cuidadoras se reconozcan y encuentren “experiencias que antes a lo mejor no éramos capaces ni de nombrar”.
“Lo que vivimos las mujeres en nuestro rol de cuidadoras apenas está reflejado en ninguna creación artística -ha afirmado-. Son relatos de ficción, pero basados en vivencias reales, que permiten poner palabras a sentimientos y experiencias muchas veces silenciadas o invisibilizadas”.
El que abre el libro se titula “Que te cuiden, hija mía”, una conversación íntima entre una madre y su hija adulta, que está a punto de tener un hijo. En él, la progenitora intenta transmitir la importancia fundamental de estar rodeada de personas que la cuiden.
Alicia Gallán explica que, a través de este relato, la madre repasa su vida y sus experiencias en el rol de cuidadora. Reconoce cómo, a veces, se “permiten” situaciones injustas o se cae en la invisibilidad dentro de las relaciones, en las que “todo el mundo espera ser cuidado por nosotras, pero nadie se ocupa de cuidarnos a nosotras”.
Señala que muchas mujeres, sobre todo las abuelas, tardan años en darse cuenta de que “todo era una trama, como una especie de estafa en la que se habían visto metidas”.
En este relato se aborda también la dificultad para nombrar ciertas vivencias, como el control económico o la falta de reconocimiento dentro del hogar".
Entre los textos se encuentran diversas experiencias: una madre que habla a su hijo; una mujer que trabaja limpiando casas y reflexiona con su jefa sobre la invisibilidad del trabajo doméstico; la historia de una hija con un padre en residencia; una abuela que celebra sus 90 años con una gran fiesta que encierra una intención oculta; y otros que exploran la complejidad y valor del cuidado.
La publicación incluye, además, un prólogo y un preámbulo donde la autora detalla sus objetivos.
Alicia subraya que “las habilidades y conocimientos del cuidado no se aprenden en libros, sino con la práctica, y son imprescindibles para la vida humana”. Añade que “se está perdiendo toda esta sabiduría sobre el cuidado que es producto de miles de años”, porque “las jóvenes tampoco aprenden a cuidar” en una sociedad que prioriza otros tipos de conocimiento formal.
El cuidado, dice, es una cultura que incluye "valores, actitudes, delicadeza y empatía”. Estos aprendizajes se transmitían tradicionalmente de generación en generación, acompañando a las niñas desde pequeñas, pero hoy corren el riesgo de desaparecer si no se visibilizan y valoran.
Como conclusión, Alicia Gallán destaca que este libro también quiere ser “una herramienta para la igualdad”, para “rescatar y proteger este legado que el patriarcado ha desvalorizado”, y que espera pueda servir para generar conciencia en diferentes generaciones.
Honrar las maestras del cuidado, que es una autoedición, está disponible en la librería Anónima.