Bob Dylan vuelve a Huesca treinta años después y lo hará con un concierto en el mismo escenario, la plaza de toros, una actuación programada por el Ayuntamiento de Huesca para el sábado 17 de junio, dentro del Prelaurentis.
Este concierto internacional completa el cartel que, como ya anunció en Ayuntamiento, incluye los conciertos de Víctor Manuel el 23 de junio y Ara Malikian el 24 de junio.
El músico norteamericano, Nobel de Literatura en 2016, tiene 80 años y está realizando una gira mundial bajo el título Rough and Rowdy Ways 2021-2024, que incluye en España, donde no actuaba desde 2019, conciertos en Madrid, Barcelona, Sevilla, Granada La Coruña y San Sebastián, y el que este viernes se ha anunciado que ofrecerá en Huesca. En Europa también ha contratado actuaciones en Francia e Italia.
La gira lleva el nombre de su último disco, publicado a finales de 2020, “muy aclamado por los críticos”, ha recordado el concejal de Cultura y Fiestas, Ramón Lasaosa. “Es un disco tranquilo -ha añadido-, pero en este concierto repasará también grandes éxitos de toda su carrera”.
Para el concierto en la plaza de toros se sacarán a la venta a partir del miércoles 15 de marzo 3.200 entradas, todas de asiento, a un precio desde 75 euros. Poder habilitar este escenario requiere de un importante trabajo de organización, por lo que Lasaosa ha destacado la labor de todas las áreas municipales, especialmente la de Cultura y Fiestas.
“Si traemos a Bob Dylan es porque se han dado una serie de circunstancias, desde la ampliación de la partida para el Prelaurentis que introdujo el grupo de Ciudadanos hasta querer contratar un concierto que luego se convirtió en dos y que el mismo promotor nos pudo ofrecer la posibilidad de traer a Bob Dylan otra vez a Huesca”. La primera vez fue en 1993, una actuación programada por la Peña Alegría Laurentina.
La partida con la que cuenta el Ayuntamiento para el Prelaurentis es de 50.000 euros para estos conciertos en la plaza de toros, donde será necesario realizar arreglos y nuevas infraestructuras, como cubrir el albero, “que van a quedar para la ciudad”, ha señalado Lasaosa. “Partimos de esa primera inversión, pero si como confiamos se venden todas las entradas, el dinero que puede recuperar el Ayuntamiento es considerable. No es una inversión descabellada para la ciudad. Nos movemos en unos criterios de sostenibilidad en todos los aspectos, también en el económico”, ha señalado.