La Feria de Andalucía de Huesca ha servido esta tarde del sábado para homenajear a un oscense ilustre que ha recorrido el mundo con sus canciones, que ha sido la gran voz del "No te vayas de Navarra" en sus tiempos con los Guaranís y que se ha visto aplaudidísimo con su interpretación de Granada. Múltiples registros pero el fundamental para recibir el tributo ha sido su contribución a multitud de causas solidarias, fundamentalmente a la Cruz Blanca, como ha reconocido el expresidente de la Casa de Andalucía, Juan Carrero.
Ha sido una velada magnífica en la que Carrero le ha entregado la última "guitarra" artesanal de un pueblo de Granada de grandes luthiers, una miniatura preciosa. Es la distinción de la Casa de Andalucía para Ramón Flores, que ha cumplido este mes de marzo 80 años que son esplendorosos, a pesar de que su voz está en proceso de "reeducación" después de los dos años de pandemia cuya inactividad acusa una "máquina vocal" tan desarrollada y estupenda como la del cantante. El repertorio ha permitido al público cantar, bailar, dar palmas y, sobre todo, fuertes ovaciones.
Como ha asegurado Ramón Flores, lo suyo son "canciones... lo que se dice canciones", no el tachún-tachún tan propio de estos tiempos. Se ha vestido la sesión de gala con dos interpretaciones de Los Panchos, "Sin ti" y "Si tú me dices ven", boleros que han dado paso a la ranchera "El Rey" de José Alfredo Jiménez que todos recordamos en la voz de Vicente Fernández. En el túnel del tiempo, ha remembrado la primera canción que interpretó con su hermano, "Perdón", otra vez Los Panchos. Hispanoamérica se ha apoderado de la sala, ahora con "La Feria de las Flores" de Jorge Negrete.
Y, claro, cabía esperar que el mayor éxito identificativo de Ramón Flores, el pasodoble de "No te vayas de Navarra", saltara al escenario con la fuerza que le caracteriza, con la capacidad de crear un magnetismo fenomenal con el público. Todos cantando, algunos con lágrimas de emoción en los ojos.
La tarde sabatina caía de sol pero la luna alumbraba cada vez más el concierto, portentoso, ya por la hora de duración. Ramón se identifica mucho con los "Suspiros de España" de Dyango, que han sonado delicados.
Ya estaba muy arriba la velada. Muchas ganas de bailar (se ha escuchado entre canción y canción a una mujer sostener que le encantaba bailar, "yo en casa bailo si hace falta con un cojín o con una escoba como si fuera mi pareja"). Ahí llegan los sones de Luis Mariano y Dama de España. Y luego, una revelación...
Ramón Flores ha asegurado -tono jocoso, entiéndase- que Luciano Pavarotti se hizo famoso gracias a él. Le escuchó cantar "O sole mío" y le copió. No estuvo mal la versión del divino tenor italiano. Y unas risas que echamos todos antes de Vienen los gitanos de Conchita Bautista. Y luego más rancheras con Jalisco. Un poco más de humor a la máquina, "Mátalas" de Alejandro Fernández, "con una sobredosis de ternura".
Ya es de noche y saltan las notas de "Sombras nada más" de Julio Solís, y otra vez al bolero con "Alma, corazón y vida". Y "El gallo sube" con el tono divertido de Los del Río.
En todo lo alto, el "Volver, volver, volver" ha dado pie a la pieza con la que más ha sido aplaudido Ramón Flores en su trayectoria. Granada, en tono operístico. Hora y media después del comienzo, hasta alguien se ha atrevido a pedir otra, pero, después de Granada, es baladí seguir en el intento. Tal sabor de boca ha quedado que es el momento de un buen rebujito, unas olivas andaluzas colosales, un poquito de embutido, de dulce y un aplaudo final. Un precioso homenaje a los primeros 80 años de Ramón Flores. ¡Vaya voz más joven la del tío! "No te vayas de Navarra, aaa". La Feria sigue. Este domingo, un buen aperitivo como colofón. Andalucía en Huesca, Huesca en Andalucía. Atmósferas complementarias hasta quedar en una.