Que no se trata de un partido más es de perogrullo. El Huesca recibe este domingo (16:15h) al Real Zaragoza en El Alcoraz, en todo un derbi aragonés que a buen seguro será una fiesta que tendrá como aliciente ese aroma de revancha tras lo acontecido en el choque de ida en La Romareda. Por eso, el guardameta del Huesca y uno de los capitanes del equipo es consciente de que es un partido “especial, por supuesto. No hace falta que lo diga yo. Es especial para toda la afición, para el club y para toda la región”.
Esperando un rival que “vendrá a ganar y estará muy juntos y con muchas ganas de apretarnos”, también vaticina un gran ambiente en la grada y espera “encontrar esa unión con lo que se hace en el campo. Todos tenemos que tener esa responsabilidad de saber lo que nos jugamos. Que salgamos como se merece a este tipo de partidos”, ha reclamado.
En lo numérico, el Huesca llega a la cita diez puntos por debajo del playoff -que marca el Albacete con 51 unidades- y a 11 del descenso. Ya son seis fechas consecutivas sin perder, por lo que “nos coge en un momento donde hemos seguido creciendo y mejorando como equipo. Estamos encontrando un equilibrio, tanto a nivel ofensivo como defensivo. En casa queremos seguir haciendo de El Alcoraz uno de los estadios más difíciles de Segunda. No sólo este año, sino todos. La afición tiene un papel muy importante y más en este tipo de partidos. Espero que haya buen ambiente, que se apriete al árbitro, a todo, y que nosotros también empujemos”.
Todavía está muy tierno el recuerdo de la ida, por lo que hay ganas de “resarcirse, en un sentimiento que tenemos todos, independientemente de que estemos haciendo bien las cosas en casa, el resultado creo que fue de lo más doloroso de la temporada”. Para ello habrá que salir con la “intensidad con la que salió el Zaragoza allí, ya que en los primeros 15 minutos salieron con más intensidad. Estamos concienciados”, ha aseverado.
Son 14 porterías a cero las que suma el Huesca y Andrés Fernández en lo que va de campaña. El portero murciano ya ha superado las 13 con las que se llevó el trofeo Zamora de Segunda División en la temporada 2010/11, en lo que fue su primera campaña con el equipo azulgrana. Está a tiempo de superar las 17 que firmó el año pasado a las órdenes primero de Nacho Ambriz y después de Xisco Muñoz. “Pienso más en ganar que en la portería a cero. Me da igual cómo; si es con la portería a cero, mejor, pero más importante es ganar y que el equipo esté bien”.
Afronta el choque con el incentivo de ganar un derbi aragonés con la camiseta azulgrana, pues nunca lo ha conseguido en su extensa carrera deportiva. Un plus para él de cara al domingo.
Posible renovación
No ha dado ninguna pista sobre su posible continuidad en el equipo altoaragonés porque ha seguido el mismo guión de la última vez que se le preguntó: “Hablaremos tranquilamente después de que termine la temporada. Hay que ver el club también cómo se va a enfocar de cara al año que viene. Con tranquilidad”.