Desde Eibar aseguran que los equipos de Ziganda son "compactos y difíciles de marcarles". No les falta razón. Eso es lo que resaltaba el ariete del equipo vasco Jon Bautista a pocas horas de comenzar el partido en Ipurúa (domingo, 18:30 horas). Ahora bien, los deberes todavía están sin hacer lejos de El Alcoraz y la de mañana es una buena prueba para empezar a ponerse las pilas y llegar a las vacaciones de Navidad con buenas notas. Mientras tanto, el Eibar, marcha octavo con 27 puntos -tres más que el Huesca- y quiere salir de un pequeño bache de tres jornadas seguidas sin ganar. Viene de empatar en Las Palmas, hacer lo propio en casa ante el líder Alavés una semana más tarde y caer en Cartagena en la última jornada. Viéndolo así, y teniendo en cuenta los rivales, no es un mal balance.
Sus números, 19 goles a favor y 15 en contra, no son para lanzar las campanas al vuelo. Es más, son comunes a los rivales que pelean por los mismos objetivos y que, en su segunda andadura consecutiva en LaLiga Smartbank, se asemejan a los de cualquier equipo que tiene como máxima premisa la salvación. Pero tan solo se han vivido 17 jornadas, por lo que todavía es demasiado pronto para sacar cualquier tipo de conclusión.
Lo que está claro es que es el cuarto mejor local con 18 puntos en su casillero; los mismos que el Villarreal B, Burgos, Las Palmas y el propio Huesca. Además, Pertenece a ese selecto club de los cuatro que todavía no han perdido ante su afición junto Alavés, Granada y Villarreal B. Lejos de Ipurúa bien es cierto que sus prestaciones disminuyen porque ha cosechado 9 de 27 puntos posibles.
Blanco Leschuk, un fijo en el once cuando el Eibar juega en Ipurúa
Garitano tiene una idea muy marcada de juego en la que suele utilizar a un punta referencia, corpulento y rematador, como es el caso de Blanco Leschuk. El argentino, de 31 años, suma cuatro goles en 16 partidos jugados. En ese rol de delantero y, según el rival, el entrenador vasco opta por rotar y colocar en la posición de referencia a Stoichkov. Otro punta con otras características opuestas que dotan al equipo de diferentes registros. En los últimos dos meses de competición ha sido el argentino el que siempre ha jugado de titular en los partidos como local. Una buena muestra de las intenciones de Garitano cuando tiene que jugar ante su afición.
El jugador más utilizado hasta el momento es el centrocampista Sergio Álvarez. El ex del Sporting está completando su quinta temporada en el equipo armero y en este curso ya suma más de 1.400 minutos. En la portería parece fijo Yoel y, arriba, el más temido para las defensas rivales es Juan Diego Molina Martínez "Stoichkov". El delantero es el máximo artillero del equipo con cinco dianas.
Otro exazulgrana por el mundo
Ya es algo habitual en cada jornada. Esta vez será Álvaro Vadillo el exazulgrana que se vea las caras ante el que fuera su equipo. El extremo gaditano de 28 años vistió durante dos temporadas (2016/17 y 2017/18) la camiseta del Huesca, equipo con el que sumó 57 encuentros. La segunda fue la más fructífera en cuanto a resultados al lograr el ascenso a Primera, aunque en lo individual fue algo más desagradecida para el joven, que sufrió varias lesiones que le impidieron mantener una regularidad.
Tierra de buenos recuerdos
Ipurúa será por siempre un escenario mágico para el Huesca. Allí ganó su primer partido en LaLiga y ahí se cultivó una semilla de ilusión para lo que estaba por venir. El debut en la máxima categoría del fútbol español, aquel domingo 19 de agosto de 2018, siempre será recordado por los aficionados azulgranas que vieron cómo un doblete de Álex Gallar hacían volar los tres primeros puntos hasta Huesca.
Desde entonces, el Huesca no ha vuelto a ganar en ese campo: en la segunda andadura en Primera División empató a uno, mientras que el curso pasado, con ambos equipos en Segunda, cayó por dos goles a uno. El balance global se lo lleva el Huesca: 9 victorias por 8 de los vascos y cuatro empates.
Volviendo al presente, la expedición azulgrana partirá este sábado a las 15:00 horas en autobús hasta tierras guipuzcoanas. En ese autobús se montará Óscar Sielva, jugador cedido por el Eibar que ya está recuperado de una lesión en el músculo semimembranoso de la pierna izquierda y que, si lo requiere Ziganda, podrá jugar ante su equipo al no existir ninguna cláusula del miedo.