La Sociedad Deportiva Huesca se va a desperezar esta mañana de lunes para estar a las 8 de la mañana en la Policlínica Quironsalud de Huesca con un caudal de futbolistas inhabitual en las últimas campañas en las que el viaje a Benasque de comienzo de pretemporada obligaba a incorporar a un importante número de jugadores del filial.
A la espera de las incorporaciones prácticamente seguras (Enol Rodríguez y Dani Ojeda), de la negociación con un par de delanteros (con conversaciones con Enrich en marcha) y de la decisión en torno a la portería (si Juampa entra salga o no del club Juan Pérez), ya son 22 los activos que se van a poner a disposición de Sergi Guilló y su cuerpo técnico el martes, presumiblemente desde las 10 de la mañana, para el primer contacto con la hierba y entre ellos.
De momento, el entrenador ilicitano cuenta en portería con Dani Jiménez y Juan Pérez -con la aludida incógnita de Juampa-, en defensa con Ángel Pérez, Toni Abad, Jorge Pulido, Miguel Loureiro, Íñigo Piña, Diego González, Sergio Arribas, Ro Abajas y Julio Alonso, en el centro del campo Javi Mier, Óscar Sielva, Iker Kortajarena, Jesús Álvarez, Jordi Martín y Manu Rico, y en el ataque Gerard Valentín, Iker Unzueta, Diego Aznar, Liberto Beltrán y Ayman Arguigue.
En el terreno de las incógnitas, los traspasos a otros equipos de Juan Pérez y de Iker Unzueta, además de la situación de Sergi Enrich tras desvincularse del Zaragoza. Ahora mismo, la balanza del futuro del mallorquín se inclinará dependiendo del acercamiento de las posturas económicas, que ambas partes acompañan de buena voluntad pero sin cerrar el punto de concurrencia de los intereses.
De los últimos movimientos y del rendimiento propio dependerá también el futuro en el club de dos que han vuelto más maduros de los clubes en los que han mostrado sus aptitudes como cedidos, Manu Rico y Diego Aznar, así como de Ayman Arguigue, del que se espera más de lo que las oportunidades le han permitido demostrar.
A pesar de que el acierto lo dictan los resultados durante la temporada, lo que resulta evidente es que ha habido un cambio en la planificación de la pretemporada, con una apuesta en el refresco de la plantilla por jugadores notables en la Primera Federación, de la confianza del míster y la compañía de algunos veteranos nuevos junto a los que ya conocen el vestuario azulgrana. Acostumbrados a la espera del cierre del mercado en medio de agonías para los aficionados, no suena mal esta nueva cultura organizativa dentro de la Sociedad Deportiva Huesca, que incluye la búsqueda de futbolistas con los que consolidar el patrimonio. En Benasque, podrán incluso sorprenderse porque llegará un equipo con forma de equipo, aunque sea en proyecto.