El Gobierno de Aragón ha analizado por primera vez en España las variables económicas atribuibles al modelo familiar agrario dentro del maremagnum de macrocifras del sector en la región, y el resultado es que solo alcanza el 18 por ciento de la renta agraria total.
Los últimos datos, correspondientes a 2021, muestran que la renta real de los agricultores y ganaderos de Aragón es de 2.100 millones de euros, un 4 por ciento más que el año 2020, pero al poner el foco en la renta real de las explotaciones familiares se muestra que apenas supera los 350 millones de euros. El hecho de que estos titulares concentraran 355 millones de euros de ayuda pública en 2020 (79% de la ayuda total) "permite concluir que hay una dependencia prácticamente del 100 por cien de la renta de esas explotaciones familires respecto a las ayudas de la PAC" y nos muestra "un sector de una fragilidad importante", según el análisis de Jesús Nogués, director general de Desarrollo Rural del Gobierno de Aragón.
La situación actual también se pone de manifiesto al analizar la renta de referencia creada por el Ministerio de Agricultura y que fija en 30.600 euros el listón que todas las explotaciones agrícolas deberían ser capaces de obtener. El estudio realizado por el Gobierno de Aragón muestra que en la región "solo el 12 % de las explotaciones son capaces de alcanzar esa renta, y aún así dependen de la PAC en más de un 80 %". Solo los titulares de mayor profesionalidad y dimensión sllegan a obtener mejor impacto de la renta y, aun así, muchos no son capaces de llegar a esa cifra de referencia.
El consejero de Agricultura, Joaquín Olona, valoró este análisis que ha realizado Aragón y del que carece el resto de España, para no obtener falsas conclusiones sobre la renta de los agricultores al fijarse solo en las macromagnitudes del sector, que indican que los agricultores y ganaderos casi doblarían la renta media de España. A través de estos datos, "resulta que la renta no llega ni a 12.000 euros, no son ni mileuristas, y si no existiera la PAC la renta real de los agricultores aragoneses (que representan muy bien el conjunto de España) sería cero", expuso. Remarcó así el consejero "la dependencia absoluta de los agricultores y ganaderos aragoneses de las subvenciones de la PAC, mucho mayor de lo que los datos macroeconómicos reflejan", aseguró.
Con este análisis en la mano, Olona volvió a defender el impulso que el Gobierno autonómico quiere dar a la Ley Protección y Modernización de la Agricultura Familiar y del Patrimonio Agrario de Aragón, un proyecto que el Ejecutivo ya ha trasladado a las Cortes de Aragón. "Es una ley imprescindible para garantizar que las ayudas públicas vayan a un modelo familiar, que de otra forma sería inviable" sacar adelante, y para tratar de que esa renta agraria que representa el modelo familiar no siga bajando, sino que aumente".
La manera de proteger la renta de los agricultores, remarcó el consejero, es por dos vías: "Mejorando la renta repercutida sobre el propio sector y concentrando mucho más y mejor las ayudas públicas, fundamentalmente la PAC, destinadas al sector".