Si el 29 de septiembre de 2022 pasará a la historia como el día en el que se conoció que por vez primera iba a haber una danzante en Huesca y la noticia conmovió a toda la ciudad, el 23 de febrero de 2023 es un segundo hito que confirma que el 10 de agosto de 2023 será una fecha maravillosamente histórica en la ciudad porque no será una, sino dos, las mujeres que danzarán en la Plaza de San Lorenzo de la capital oscense. A Ibón Cejalvo, se suma Cristina Esperanza Mendoza, a la que ha dado el relevo su padre, Jesús, de la saga de los Cacón.
Cristina Esperanza, de 41 años, es la hija mayor de Jesús, 51 años de danzante, trabaja en la banca, ha seguido toda la vida a su padre, desde muy pequeña, y disfrutó viendo a su abuelo, el gran e histórico danzante Cacón. Tiene una hija de dos años.
Ha habido triple relevo en la reunión de este jueves, ya que su hermano Fernando, danzante desde 1996, ha cedido también el lugar a Fernando Esperanza Mateos. Igualmente, a Santos Santolaria (antigüedad, 1988) le sucede Santos Santolaria Moreno.
Fechas de inmensa felicidad en la familia Esperanza y es que Fernando Esperanza Mateos, atleta de primer nivel, ha sido este pasado domingo padre de un niño al que han llamado Lorenzo.
Fernando Esperanza y Santos Santolaria dan el relevo a sus hijos Fernando y Santos
El 29 de septiembre fue un día de alborozo. La Agrupación de Danzantes de Huesca celebraba reunión para renovar la Junta Directiva y saltaba una gran noticia que cambia el rumbo de la historia de los míticos protagonistas de las fiestas de San Lorenzo: la incorporación de una mujer: Ibón Cejalvo Aljama. Correspondía a ese encuentro la renovación de su máximo órgano, que escogió a Jorge Lorenzo Escario como presidente, y de paso se trataban las cuestiones habituales de los casi treinta integrantes de la agrupación.
Los danzantes, conocida la decisión de Daniel Cejalvo de retirarse de la ancestral manifestación festiva, daban la bienvenida a la decisión del emblemático miembro de la agrupación, y aprobaban el nombre de Ibón Cejalvo Aljama como nuevo miembro. Se daba la circunstancia de que Ibón era ese año mairalesa por el Barrio de San Lorenzo.
El 10 de agosto de 2023 se producirá el histórico hecho de ver bailar, en los cuadros tradicionales, a las dos primeras mujeres danzante de la historia desde que existen referencias documentales, en el siglo XVII. Los palos nuevos, los viejos, las espadas, las cintas y el Degollau contarán por vez primera con representación femenina.
Esta novedad ha hecho felices a los danzantes, que insisten siempre en que se trata de una agrupación abierta y, por tanto, nada ajena a la evolución de la tendencia a la modernidad.