Tras la inauguración de la exposición de esculturas en la céntrica plaza López Allué, como un regalo para el Casco Viejo de Huesca que vive de lleno sus fiestas, le llegó el turno a la pintura. Un manto de creatividad cubrirá este emplazamiento hasta este sábado, dando continuidad a la idea que concibió Faustino Belenguer.
Entre las 18:00 y las 21:00, el público podrá disfrutar del talento de Marisa Torres, María José Lloró, Luis Toro, Antonio Cuenca, Gonzalo Alfaro, Angelines Gracia, Rogelio Santolaria y Piter Saura, este último el autor de la portada del programa festivo.
La inauguración se desarrolló con la presencia de Violeta Gracia, presidenta de la Asociación de Vecinos del Casco Viejo, que estuvo acompañada por Susana Oliván, la nueva concejala de Participación Ciudadana y Barrios, así como las mairalesas.
Entre otros trabajos, una obra de Luis Toro reflejaba una antena parabólica con forma de elipse, rodeada por un fondo místico adornado con espirales áureas. En el centro, una figura, llena de colores vibrantes, evoca la verdad velada. Esta pintura se inspiraba en una escultura de Antonio Corradini, creada en 1790.
Marisa Torres, por su parte, plasma sobre dos lienzos sendas figuras en tonos azules, utilizando una hábil combinación de espátula y pincel.
María José Lloro elige una serie de sugerentes motivos para sus lienzos, como el mar, unas hortensias, el reflejo de los majestuosos mallos de Riglos y otros asuntos con los que crea obras realmente armoniosas.
Angelines Gracia, con su destreza y dedicación, exhibe dos pirograbados, creados de manera muy laboriosa, y Rogelio Santolaria nos obsequia con una pintura que fluye desde su activa imaginación y que representa una suerte de formas geométricas y combinación de colores.
La exposición se completa con una ciudad lluviosa y una marina, de Antonio Cuenca, y los frescos paisajes de Gonzalo Alfaro.
El espíritu de Faustino Belenguer sigue vivo y su figura continúa guiando los pasos de sus compañeros y amigos, alegrando el Casco Viejo de Huesca, al mismo tiempo, en los días de sus singulares fiestas.